05170-136.POLÍTICA. Todo católico/socialista es un hipócrita

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      Hay quién se empeña en ser "católico y socialista"; tal conjunción no es posible.

      Se podría afirmar que "el saber" se sostiene en tres elementos esenciales de la Triple Columna del Saber; la Razón en cuanto prueba de la sabiduría, la Percepción en cuanto manifestación práctica de los sentidos, y la Física en cuanto realidad indemostrable, de forma que el Pensamiento  es el resultado de una “idea”; en este caso "católico" es el sentido, "socialista" es la razón, es decir, la verdad no puede estar en dos lugares a la vez ya que las ideas tienen su origen en el mundo sensible y experimentable, pero son desarrolladas por el mundo de la razón, ya que la Verdad tiene que ser pensada para superar a la mera opinión. Sin embargo, cuando la razón y el sentido se conjugan dan lugar a la convicción personal.

      En la CONVICCIÓN PERSONAL todo es posible, incluido el ser "católico/socialista", cuando más allá de la "opinión" se ejerce "la verdad" como cosa no pensada.

     Toda RELIGIÓN requiere de "fe" o no es necesario pensarla, es una opinión personal que deviene en convicción personal, es decir, absoluta. Toda POLÍTICA requiere de "pensar" o es necesario pensarla, salvo que la "política" sea una convicción personal o no necesaria pensarla.

     Lo CATÓLICO no se piensa, se siente. Lo SOCIALISTA se piensa, no se siente, pero se puede sentir como se siente "lo católico", de ahí que si "lo socialista" se siente, no se piensa, como no se piensa "lo católico", de forma que si no se piensa, es un absoluto de la convicción personal o de la mera opinión.

     LO CATÓLICO afirma a Lo/Eterno/Dios, y Dios, con ser eterno es el único que posee riqueza, no trabaja, es quién ha construido a la Persona y lo ha dispuesto, con su voluntad absoluta, sobre la Tierra, y si lo ha hecho con su voluntad absoluta es cierto que Dios, que no trabaja, ha puesto a trabajar a la Persona, luego Dios es un empresario.

     LO SOCIALISTA es, en sí mismo, la idea que "todos" han de trabajar, y que el empresario es el látigo del trabajador, el rico, el que hace del trabajador un esclavo y un animal que trabaja para el empresario. Pero, y además, "lo socialista" significa igualdad y reparto de la riqueza, de modo que sí Lo/Eterno es un dios/empresario que esclaviza a la Persona en una cárcel llamada Tierra, "lo socialista" está contra Dios y lo niega.

     A la vista de lo anterior, sí "lo católico" afirma a Dios, y "lo socialista" lo niega, se hace evidente que no existe la conjunción "católica/socialista", de forma que quién se proclama "católico" y "socialista" bien no piensa, bien miente, bien se contradice y duda, bien acepta la dictadura y el absolutismo del Representante de Dios en la Tierra, al que debe obediencia, reconociendo que la igualdad no existe, de manera que si la igualdad no existe no se puede ser, al mismo tiempo, "católico" o que niega la igualdad y "socialista" o que afirma la igualdad.

   Cabe, para terminar, concretar que lo que persigue un CATÓLICO es ser parte de una "comunidad", lo que también acontece con un SOCIALISTA, y aquí parece que ambos, católico y socialista, sean lo mismo, pero "el católico" quiere una comunidad gobernada por Lo/Eterno/Dios, mientras que "el socialista" quiere una comunidad gobernada por La Persona.

      Dicho de otro modo, QUIÉN se autodefine como "católico" y "socialista" es un hipócrita. Otra cuestión son las "partículas elementales" que pueden estar en dos lugares del espacio al mismo tiempo.