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03137 (16.09.2016 - La puerta abierta)
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ELLE es una película francesa de 2016, de 130 minutos de duración, un drama personal, dirigida por Paul Verhoeven, guión de David Birke, basadado en una novela de Philippe Djian, música de Anne Dudley, fotografía de Stéphane Fontaine, interpretada por Isabelle Huppert (Michèle), Laurent Lafitte (Patrick), Charles Berling (Richard), Christian Berkel (Robert), Jonas Bloquet (Vincent) y Anne Consigny (Ana)
La película cuenta la HISTORIA de una mujer con una patología mental oculta de tipo sexual, perversa para sí misma y aparentemente bondadosa con los demás, especialmente descrita en la relación con su hijo, cuyos objetivos se logran subliminalmente desde una posición de dominio, donde la frialdad de su carácter se entrelaza con una cálida relación social, donde la realidad resultante ofrece un personaje amable recubriendo cierta crueldad oculta. Junto al personaje principal (Michèle) se derivan diversas historias que sirven para desvirtuar la trama principal de la cinta, pobre en sí misma, de forma que lo que empieza siendo una violación con una posible trama vengativa, termina siendo el expositivo emocional de una mente pérfida originada por un trauma infantil que tiene su renacer en el acto mismo de la violación, donde Michèle termina disfrutando especialmente del sexo.
ISABELLE HUPPERT (Michèle) es la esencia de la película pero no es la existencia de la historia, existencia que se reparte entre los diversos personajes, aunque sin duda Huppert es el motor director de la prácticamente totalidad de las secuencias, resultando casi imposible captar una secuencia donde Huppert no intervenga, de forma que Michèle se impone cinematográficamente por encima del resto de los personajes, todos los cuales están bien llevados por una DIRECCIÓN donde la NARRATIVA y el GUIÓN no responden a elementos sicológicos profundos, y donde los aspectos emocionales brillan por su ausencia, y por otra parte un MONTAJE que oculta perfectamente las diferentes costuras que contiene la cinta y que difícilmente son apreciables.
La comprensión de MICHÉLE se sostiene en diversas escenas que quieren hacer comprensible al personaje; así, la escena de la masturbación resulta mala, los resultados físicos de las violaciones son ignorados por el MAQUILLAJE, y las propias violaciones responden más a un juego aceptado que a una violación real, la secuencia de la exposición del pie de Michéle sobre la entrepierna de Patrick durante la cena es deprimentemente mala, mientras que por otra parte es significativa, en cuanto a dominio y sexualidad, la escena del "rabo" del empleado, o la secuencia de la venganza cuando Michelle declara su culpabilidad sexual ante su amiga.
La FOTOGRAFÍA muestra perfectamente el contenido frío y tenebrista de la narración; estamos en París La Ciudad de la Oscuridad, que algunos se empeñan en llamar de La Luz, donde lo sombrío es notorio, entre un blanco-grisáceo y un negro, colores que recogen la calma y el misterio de Michèle en un mundo enteramente estéril que contrapone la vida actual del personaje con los recuerdos de su niñez. La ILUMINACIÓN es el propio contenido espacial donde se desarrolla la escena, colores citados anteriormente y combinados con color madera y negro en las escenas de violación, blanco en ocasiones, y el negro de la noche, estando ejecutada de forma frontal normalmente y en ocasiones lateral, con cierta incidencia en la exposición de siluetas, siempre acompasada por un RITMO donde predomina lo rápido-agitado en las escenas entre trozos largos y breves, sin detalles, acompañado de una MÚSICA que no se significa, y con carencia de RUIDOS, siendo bueno el SONIDO
Dos localizaciones exteriores, la calle donde vive la protagonista y la de un entierro, se unen a diversos interiores que no requieren especial consideración artística, sin que el proceso general de la cinta obre especialmente la CÁMARA, con planos medios y de tres cuartos, planos de semi-conjunto y alguno general, zum de avance y primeros planos en las escenas de la violación, algunos detalles y poco más, correspondiendo a ciertas panorámicas y una angulación horizontal la totalidad del metraje
La película dura más de dos horas porque la trama principal podría ser resuelta en menos de una hora, y porque las tramas secundarias son muchas y reclaman su tiempo de metraje, de modo que la historia termina siendo un pupurrí de pequeñas historias pegadas por el personaje principal en sus obsesiones sexuales. Resumiendo, es una cinta que se puede o no se puede ver.
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