domingo, 13 de febrero de 2022

06760-257.ALICANTE: 39.Historia: 05.Refugios de 1936-1939: Casa de Máquinas, y Refugios de Séneca y de Balmis

DOCUEMENTO ANTERIOR
06701 (14.12.2021 - 35.Historia
                                  01.Refugios de 1936-1939
                                  Leyes Históricas de Memoria, 
                                  de Desmemoria y Selectiva)
06704 (15.12.2021 - 36.Historia
                                  02.Refugios de 1936-1939
                                  Plan de Mola, 
                                  valor estratégico de Alicante, y bombardeos)
06708 (17.12.2021 - 37.Historia
                                  03.Refugios de 1936-1939
                                  Características y listado de refugios)
06712 (19.12.2021 - 38.Historia
                                  04.Refugios de 1936-1939
                                  Visitas a los refugios 
                                      y defensas de la ciudad)

DOCUMENTO POSTERIOR
06762 (14.02.2022 - 01.Casa de Máquinas
                                  Saneamiento del Puerto, año 1905-1908
                                  Guías turísticos)

       En cuatro documentos anteriores ha sido descrita la situación de ALICANTE en la Guerra entre los años 1936-1939; antecedentes generales, situación estratégica de la ciudad, material bélico empleado, sistemas de alerta, y la construcción de refugios, detallándose, asimismo, los cuatro refugios visitados por Cómodo Centón.

       En esta ocasión, la visita corresponde a los refugios de Séneca y Balmis, así como la realizada al Centro de Interpretación ubicado en la Casa de Máquinas situada entre las actuales calles de Italia, antes Manuel Cano, y Portugal, antes Eugenio Barrejón,

    La CASA DE MAQUINAS es un edificio industrial del año 1908, que ejerce como Centro de Interpretación. Dispone de un patio central para el manejo de vehículos y dos edificios enfrentados. A la izquierda se sitúa una nave, partida en dos, donde se ubicaban las máquinas que permitían el bombeo de las excretas producidas por los vecinos de Alicante, y que desde aquí eran dirigidas al Barranco de Agua Amarga mediante tuberías. A la derecha vemos un edificio, partido en dos, donde se situaban las oficinas y la vivienda del encargado del lugar. 

      El conjunto contiene papeles informativos, un mapa de operaciones y diversos objetos como una ametralladora rusa y un coche de bomberos.

      El REFUGIO DE PLAZA DE SÉNECA queda situado en una antigua zona de naves industriales que, con posterioridad a la Guerra de 1936-1939, se destinó a Estación de Autobuses, siendo conocida como Plaza de Séneca/Autobuses. Asimismo, es parte de la ciudad que padeció un mayor número de impactos de los bombardeos.

     Es el número 31 del listado de refugios; su cabida es de unas 1.200 personas, y su profundidad alcanza los cinco metros, siendo su longitud de unos treinta metros por unos cinco metros de anchura, con un pasillo central y cubículos cuadrados a ambos lados del mismo. Se trata de una estructura de muros de mampostería hormigonada, losa superior de hormigón armado, y sobre esta una capa de arena. El suelo es de tierra y roca, y se aprecia en el mismo la humedad como consecuencia de una elevada capa freática. 

       Dispone en su interior de una simulación, en audio, que permite escuchar, en la oscuridad, el ruido de las sirenas que anunciaban un ataque aéreo y los motores de los aviones sobrevolando la zona. 

       El REFUGIO DE PLAZA BALMIS, antes de Torrens, es el número 46 del listado de refugios; su cabida es de unas 200/250 personas, y su construcción fue con capital privado. Los vecinos de la zona ocupaban un conjunto de casas de estilos modernistas y de eclecticismo histórico, junto a edificaciones ocupadas por la clase media, lo que implicaba un nivel social elevado; dichos vecinos reunieron dinero suficiente para construirse un refugio propio con características de cierto confort. Sin embargo, y a pesar de tal sentido de propiedad privada, era de acceso general y no era posible impedir la entrada a gentes que no hubieran participado en la financiación del mismo. 

     Su diseño responde a un rectángulo de unos doscientos metros cuadrados, con seis zonas de acogimiento y bancos de piedras corridos enlucidos con cemento y de cierta comodidad, techos de bóveda conteniendo amplios respiraderos tubulares, y paredes pintadas que dejan ver una primera capa de ladrillos, tras la cual se disponía la masa hormigonada,  extendiéndose, en horizontal al suelo, una cenefa que, en origen, se cubría con azulejos, respondiendo el acceso de los citados amplios cubículos a huecos de la misma característica de las puertas de un submarino. El suelo es duro y plano, presentando casi ausencia de humedad. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario