domingo, 20 de febrero de 2022

06768-260.ALICANTE: Sinfonia 21 de Lalo y Quinto Concierto de Shostakóvich

DOCUMENTO ANTERIOR
06710 (18.12.2021 - Conciertos para piano 21 de Mozart 
                                  y 1 de Beethoven de Javier Perianes

DOCUMENTO POSTERIOR


       Hemos asistido en el ADDA de Alicante a un concierto de la orquesta titular. De nuevo hemos quedado maravillanos ante la ejecución de la ORQUESTA DE ALICANTE, tanto en sus elementos solistas como en su conjunto.

     En primer lugar, ha sido expuesta la llamada SINFONIA ESPAÑOLA OPUS 21 (1873) de EDUARDO LALO (1823-1892) que, responde, en realidad, a un concierto para violín, y a cargo de la violinista LETICIA MORENO, la cual ha dado muestras sobradas de su virtuosismo con el citado instrumento, al cual acompañan flautas, oboes, clarinetes, fagots, cornos, trompetas, trombones, percusiones, arpa y cuerdas

       Se trata de una pieza de unos treinta y cinco minutos de duración, distribuida en cinco movimientos. donde predomina el indicador de rápido en sus diferentes fases con instantes de muy rápido y acelerados, e indudable viveza en diversas ocasiones, que precisan de los músicos pulsos de potencia y energía.

      El primer movimiento o allegro non troppo de ocho minutos de duración lo inicia la orquesta con potencia instrumental que repite el violín, deviniendo en una melódia gitana propiciada por el solista y acompañada por el punteo sobre las cuerdas, seguido por un segundo tema más liviano y unas notas habaneras, y una terminación en prestisimo.

      En el segundo movimiento o allegro molto de cuatro minutos de duración, asistimos a una fiesta popular con jota, y que resulta brillante entre, denuevo, punteo sobre las cuerdas y solo del violin.

      El tercer movimiento o allegretto non troppo de seis minutos de duración es una conversación del violín consigo mismo entre graves y agudos, donde se pueden apreciar notas melódicas tanto melancólicas como de cierta tristeza que enlazan con cierta voluptuosidad de la orquesta y agudos momentos agitados del violín.

        Con el cuarto movimiento o andante de siete minutos de duración la melancolía orquestal muta e un cierto aspecto luctuoso, de forma que la tristeza lo invade todo hasta culminar en una danza y suave final

       Termina la supuesta sinfonia con un quinto movimiento o allegro  de diez minutos de duración con el regreso a temas anteriores y con un rotundo final.

       En la segunda parte se desarrolló la QUINTA SINFONÍA (1937) de DMITRI SHOSTAKOVICH, Op.47 de unos cuarenta y cinco minutos de tiempo, en línea con la doctrina oficial del fascismo/comunismo de la Unión Soviética del dictador Stalin y su realismo de masas/corderos.

      La instrumentación requiere de flautas y flautín, oboes, clarinetes, fagots y contrafagot, trompas, trompetas, trombones, tuba, timbales, caja, triángulo, platillos, bombo, gong, carrillon, xilófono, arpas, piano, celesta y sección de cuerda. 

      Shostakóvich mencionó que era una mezcla de lirismo y heroicidad del hombre nuevo que quiere forjar el comunismo de Stalin, aunque en realidad responde a una exaltación de la figura del dictador fascista/comunista causante de millones de muertos en los campos de exterminio de Siberia.

       Se estructura en cuatro movimientos con dos rápidos, uno tranquilo y un muy despacio.

      El primer movimiento o moderato de quince minutos de duración contiene una entrada lúgubre con cierto grado majestuoso al que sigue un segundo tema a cargo de la flauta, todo lo cual conduce a una marcha o supuesto desfile de cierto carácter bufón, que recuerda a Carmen de Bizet, dando ligereza y velocidad al desarrollo hasta conducir a una débil terminación de la pieza.

       El segundo movimiento es un allegretto, de unos seis minutos de duración con forma de scherzo en forma de valls, que recuerda a Mahler en su quinta sinfonía, entre violín y arpa, a lo que sigue la danza popular ya expuesta, con una coda final.

       El tercer movimiento o largo de unos quince minutos de tiempo,  es una sucesión tranquila de notas mediante lo lirico de un tema que progresivamente irá aumentando un fondo tensionado que regresa a su norma espaciada y lenta

      El último movimiento o allegretto non troppo responde a unos once minutos de duración. La marcha de redobles de timbales anuncia al nuevo hombre, continuando con cierto tono lirico que recuerda a Tchaikovsky, y que se rompe con una elevación triunfal mediante una coda explosiva del conjunto orquestal.

No hay comentarios:

Publicar un comentario