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07931 (14.12.2023 - 28.Contribución a Así habló Zaratustra
de Nietzsche
09.Otros conceptos de Hombre
El Hombre Superior)
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07944 (20.12.2023 - 30.Contribución a Así habló Zaratustra
de Nietzsche
11.Otros conceptos de Hombre
El Hombre Sublime)
Zaratustra, en su caminar, descubre otros conceptos de hombre. Estos hombres están por encima de la plaza pública y no responden a la idea de dominación sobre el populacho.
Por un lado, el HOMBRE BUENO desea las cosas viejas y que las cosas viejas sean conservadas. Por otra parte, el HOMBRE NOBLE es aquel que no humilla a los demás, aquel que aspira a crear algo nuevo y una nueva virtud. Ambos, en conjunto, se salvan del desprecio de Zaratustra y dan motivo para la esperanza, aunque ninguno de los dos está capacitado para andar sobre la cuerda en el abismo. Ambos son la NUEVA NOBLEZA, la cual se caracteriza por posicionarse contra el populacho. Advierte Zaratustra que es necesaria que sea nutrida dicha nobleza, de forma que muchos nobles puedan iniciar la nobleza en el hombre. Estos son los que mutan de hombres a dioses, los que reniegan de la existencia de dioses divinos y, sobre todo, se alejan de la existencia de un solo dios, de manera que dicha nueva nobleza tiene el valor de aquello que carece de precio y se ubica en el centro, estando, de tal modo, en todas partes. Más, aun recibiendo cierto beneplácito de Zaratustra, ni el bueno ni el noble cumplen las expectativas, lo que es debido a que ninguno escucha las palabras de Zaratustra.
Desestimados el hombre superior, el bueno y el noble, y renegando el hombre del populacho, queda un paso adelante que pueda conducir al superhombre. El HOMBRE CREADOR es aquel que crea, y crea porque desprecia, haciéndolo en su soledad y sometido a su fatiga. En este hecho creador se destruye la unicidad de la realidad y surge la capacidad de lo malo y de lo bueno, de modo que las cosas son buenas o son malas conforme dictado del hombre creador; en cierto sentido parece generarse un proceso que permite que los viejos valores del hombre han de ser superados por los nuevos valores del superhombre.
El destino de Zaratustra es hallar a los creadores, los que tienen oídos para oír, los que viven en soledad, los que están dispuestos a renunciar y merecen recoger la felicidad de Zaratustra, siendo así que es a ellos a los habla Zaratustra y les dice como llegar al superhombre mediante una voluntad nueva.
Nos encontramos ante la fuerza creadora como arte cuyo fin es el propio ARTE en cuanto dignidad como fin en sí mismo, lo que implica que el arte no puede someterse al mercadeo; sí el arte se vende como mercancía es porque el espíritu que lo crea muestra su parte egoísta, es decir, la aprehensión de la materia por encima del espíritu, de forma que el arte ya no está obligado con la verdad ni es verdad. Lleva tal idea a considerar que el arte refleja dos enunciados diferentes, uno primero en cuanto a arte en sí mismo y otro en cuanto a compra-venta. En el primer caso el arte es creador y está hecho por la Persona Creadora. En el segundo caso nos encontramos con la Persona Masa en cuanto que prevalece la utilidad del arte sin esencia. Tales conceptos implican, conforme la Idea de la Persona, que la Persona Masa ha de someterse a la Persona Creadora y que el arte del primero se subordina al segundo, ya que el arte de la Persona Creadora es mejor mientras que la Persona Masa responde a un arte útil.
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