viernes, 1 de noviembre de 2019

05471-103-CINE: Joker

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02642 (16.12.2015 - 57.CINE: Notas para descubrir al malo y al bueno)
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05485 (08.11.2019 - Parásitos)


     JOKER es una película de Usa, del año 2019, de 120 minutos de duración, un drama de asesinatos y violaciones generalizadas de todo tipo, dirigida por Todd Phillips, guión de Todd Phillips y Scott Silver, música de Hildur Guðnadóttir, fotografía de Lawrence Sher, montaje de Jeff Groth, vestuario de Mark Bridges, dirección de arte de Laura Ballinger, decorados de Kris Moran, e interpretada por Joaquin Phoenix (Arthur Fleck, el payaso),  Robert De Niro ( Murray Franklin, presentador de televisión), Zazie Beetz (Sophie Dumond, el amor del payaso), Frances Conroy (Penny Fleck, La madre del payaso), Brett Cullen ( Thomas Wayne, el millonario), Glenn Fleshler (Randall el falso amigo).

     Cuenta la HISTORIA de un payaso que ha sufrido violaciones por golpes de niño, consentidas por su madre adoptiva, que ha sido reiteradamente agredido por la sociedad a lo largo de su vida, que ha estado instituciones mentales, todo lo cual le lleva a un comportamiento social de rencor y venganza, donde el valor de la vida humana no existe.

  Estamos ante una exaltación del terrorismo individual en estado puro, exaltación del fascismo/comunismo, exaltación de la delincuencia, exaltación de la maldad, donde el odio preside la escena en virtud de justificaciones inaceptables, de forma que El Payaso te mata si estas de acuerdo con él, y te mata si estás en desacuerdo con él. El Payaso solo sabe matar para exaltación de su ego personal, y no importa a quién mata, simplemente mata. No hay nada gracioso en El Payaso, nada hay divertido, no hay drama ni comedia, solo un asesino que solo aspira a ser asesinado. El resultado es una patética representación de alguien (Hitler, Stalin, Mao, y otros asesino similares) que solo es un asesino lleno de mezquindad, nacida de la médula espinal, hasta los huesos, dirigido por un cerebro que se mueve por el odio acumulado y no manifestado, resultando cierta condescendencia en el espectador.

      El Payaso cumple con diferentes números de las "notas para descubrir al malo y al bueno" de Cómodo Centón en su documento 02642 de 16.12.2015 de este índice. Así:

02- Aquel personaje que empieza siendo bueno, termina siendo malo
09- Si un personaje bueno es tratado mal por el bueno y se convierte en malo, es porque era malo
10- Cuando el malo no sale, el bueno es el malo pero no es el malo
11- Cuando en la película buscan al malo, el malo es el bueno
12- Cuando faltan cinco minutos para terminar la película y está todo por resolver, el final es malo
14- Si el actor favorito del espectador es el malo en la película, en el fondo es el bueno
15- Si el actor favorito del espectador mata, mata con razón
18- Cuando un personaje es un obstáculo para la felicidad del bueno, se acaba con él

       JOKER es un comodín pues hace de bueno y de malo, un bufón de sí mismo pues interpreta ante sí mismo, una mezcla de guasón y bromista que carece de gracia, de vestimentas extravagantes, maquillaje excesivo y pelucas llamativas, que no sabe burlarse de lo cotidiano. 

      En Joker asistimos a dos tipos de personajes; el personaje/total o Joker que aparece en la totalidad de las secuencias y prácticamente en todas las escenas. Hay unos personajes,secundarios como el presentador de televisión, la madre del payaso, la falsa/novia del payaso, el rico despreciable, y el amigo/traidor entre otros, y que contribuyen a reformar la omnipresencia del Payaso. 

      JOAQUIN PHOENIX es la película, su interpretación raya lo sublime, y con su presencia absorbe a los diferentes elementos del metraje, de modo que fuera de Phoenix no hay película. Destaca junto a él, pero por debajo, esa presencia evidente de Robert De Niro que, en el fondo, hace de sí mismo, mientras que el resto de los actores son planos y existen al servicio de Phoenix. La DIRECCIÓN es secundaría en la medida que Phoenix crea un personaje que no precisa de dirección. El GUIÓN funciona porque funciona al servicio de Phoenix, y los DIÁLOGOS están al servicio de  Phoenix, aunque son precisos y suficientes para explicar el contenido NARRATIVO.

     El MONTAJE de la cinta no comete errores apreciables, los cortes son adecuados y sostenidos entre secuencias, aunque en ocasiones es algo acelerado y permite que la imaginación del espectador aporte parte del contenido. La MÚSICA es excelente, aporta realidad a la narrativa, imprime diferentes sensaciones, en relación al Payaso, que el espectador recibe con absoluta claridad tanto en sus sentidos como en su razón, y que acompaña magistralmente a Phoenix. 

      El VESTUARIO es normal, tanto en El Payaso como en el resto de los personajes, mejora el MAQUILLAJE, que aunque resulta usual está bien tratado y definido.

      Se distingue claramente y bien separados los aspectos técnicos de dirección de arte, decorados y fotografía. Los DECORADOS, tanto exteriores como interiores, contienen funciones bien definidas y definen las sucesivas secuencias en el ámbito que les corresponde, a lo que ayuda perfectamente la DIRECCIÓN DE ARTE con toda una abundancia de utilería de objetos comunes, donde destaca "la pistola" como elemento creador de desarrollos escénicos, de forma que la ESCENOGRAFÍA es plenamente realista y visualmente agresiva en la mente del espectador. No resulta especial la FOTOGRAFÍA, el encuadre de la "famosa escalera" deja que desear, así como en las revueltas callejeras, mejora con la fachada del hospital y en la escena final. 

      La ILUMINACIÓN es complementaria del negro dominante, estableciendo contrastes de fondo con luces entre principales y moderadas. La LUZ se desarrolla, en muchas ocasiones como lateral en decorados internos, produciendo proyecciones, detrás de las figuras humanas, sobre objetos de ambiente, generando profundidad de campo. en cuanto al COLOR el negro es el eje vertebrador de la cinta, acompañado de grises continuados y contrastados con ocres y amarillos ligeramente vivos, que contrastan con el traje rojo de El Payaso, resultando una cinta fría con cierto calor, aunque en ocasiones destaca como sujeto principal el ocre, de modo que los colores son oscuros para El Payaso y claros por sus enemigos. 

     Queda la CÁMARA dominada, en un elevado porcentaje, por Phoenix; en ocasiones se tiene la impresión que los movimientos de la cámara dependen de los movimientos de El Payaso. Los travelin iniciales, de avance, retroceso, paralelos y de persecución dejan paso a primeros grandes planos de Phoenix, y diversos planos de detalle que presentan vida interior y valores significativos en el metraje, que contrastan con planos generales que destacan el ambiente, sin olvidar planos horizontales con diferentes encuadres dentro de angulaciones de igual nivel, con dos oblicuas desde arriba y desde abajo, dentro de un RITMO más largo que acelerado que intercalan acciones diferentes, estableciendo diversos ritmos de corte.

     Estamos ante una película muy recomendable de ver, estropeada por las dos escenas finales, y que supera el concepto de "buena" para situarse en el principio de una "gran película", pero ésto último, como es habitual, lo determinará si Joker soporta un segundo y tercer visionado.

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