jueves, 28 de noviembre de 2019

05523-54.FÍSICA: 02.Siglos XVIII-XIX: La Física

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LA FÍSICA

        Dos son los conceptos básicos de la FÍSICA, la luz y el vacío, y ambos son los elementos fundamentales del universo, el cual está ocupado por materia.

        Nos ha dicho la Evolución de Las Ideas que Lo/Eterno es el origen en sí mismo y del todo, y la Persona se lo ha creído, de forma que la “energía” es el fundamento de lo existente y el componente originario de la materia. Conforme a lo anterior, la LUZ todo lo ilumina, es inteligible y mueve el “pensar” ya que es Lo/Eterno, de modo que en ausencia de luz, nada se esparce y, por tanto, nada se ve, o dicho de otro, sin Lo/Eterno no existe ni lo posible ni lo imposible. En cuanto al VACÍO, nos dice la Idea de la Persona, no existe ya que todo está ocupado por Lo/Eterno.

        Ahora bien, Lo/Eterno, sobre lo qué es, y es todo, crea el universo y lo llena de materia sometida a unas leyes, las cuales generan un proceso de existencia y vida sobre “nada”, que es un sistema continuo entre dos partes de materia.

        Ya se ha dicho en páginas anteriores como todo cuanto vemos es Materia, de modo que aquello que no es materia es vacío. Vemos como el “espacio” contiene cuerpos, y como entre esos “cuerpos” no existen cuerpos, de ahí que a esa parte del espacio que carece de “cuerpo” que ocupe un espacio le llamamos Vacío.

       Sin embargo, y por otra parte, admitimos que entre dos puntos hay otros puntos, ya que, de no ser así, la medida espacial sería imposible de tomar. Si todo está lleno de puntos, ¿qué es el Vacío?; de hecho, no parece que sea el espacio entre dos cuerpos, ya que entre dos cuerpos admitimos la existencia de puntos espaciales, ciertamente infinitos, a cada uno de los cuales se les remite cierta cantidad de densidad de materia, por lo que y llegados aquí, decimos que todo es MATERIA.

       Sin embargo, la percepción de la Persona cuando contempla el “espacio” es que no todo es materia, ya que advierte a simple vista como entre dos cuerpos hay “nada”, esto es, no hay materia, de modo que dichos cuerpos, y por la presencia de esa “nada”, pueden alejarse y acercarse entre ellos.

       Si todo es materia, el UNIVERSO es materia, y la luz, como materia que es, circula como energía en un universo infinito que siendo Lo/Eterno carece de centro y de punto alguno de referencia. Tal estructura universal hace que el SABER sea una conjetura y que las diferencias de “saber” desaparezcan en el infinito. No obstante, sí el Universo es infinito no se puede medir en cuanto tal, pero si se puede medir su materia, que decimos se mueve o que no está en estado estático, sino que el Universo es infinitesimal, no infinito.

        Desde este momento el desarrollo de la Evolución de las Ideas crea un campo de posibilidades de ideas que tratan de insertan a la Luz dentro del universo. Cuando se lanza un objeto a una balsa donde el agua está en equilibrio, la posición del agua sufre una perturbación en forma de ondas que se expresa mediante valles y crestas; con la luz sucede lo mismo, de modo que una interferencia sobre el halo construye y destruye zonas iluminadas y oscuras, esto es hay una luz visible y otra luz invisible, lo que permite apreciar un cielo nocturno oscuro y otro claro en el sentido de que consta en la luz un punto energético más allá del cual la visión de la persona no alcanza. Es decir, no se trata del universo, se trata de la persona.

        Otra de las ideas que cobra importancia es la Energía en cuanto esfuerzo como transferencia de medida de calor de un cuerpo a otro en virtud de una diferencia de temperatura, de modo que dicha transferencia entre dos cuerpos, entendidos como un sistema, se conserva, es decir, ni se crea ni se destruye, y siempre el traspaso es del extenso cálido al menos cálido. Dicha transferencia implica un Trabajo como transferencia de energía sin que exista diferencia de medida; el esfuerzo es el “trabajo” realizado para que tenga lugar el intercambio, de forma que energía absorbida es el trabajo realizado, lo que hace que el resto no usado en la transferencia se incrementa en el “tiempo”, dejando un resto de desorden o de incertidumbre, que es energía que se pierde, más allá del sistema antes citado, y que se convierte en Trabajo Inútil o ENTROPIA, que deriva en una distribución aleatorio de elementos, produciendo una mayor cantidad de AZAR o energía perdida, lo que, a su vez, varia el orden a la par que incrementa el desorden, evidenciándose una aumento de la cantidad de energía perdida. Ahora bien, la energía ni se crea ni se destruye, sólo se transforma, de manera que la energía fluye de lo caliente a lo menos caliente, pero si de admite que el Nivel de Desorden es constante, el número de microestados posibles para el sistema tienen la misma probabilidad de aparecer.

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