00340-22.SOY EL DESCANSO DE MI MISMO: Matemáticas e Idea Suprema

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Las MATEMATICAS son un instrumento de aplicación de la Razón, ya que en la Naturaleza no aprecia el Hombre figuras exactas sino que lo que existe en su pensamiento se expresa mediante representación de esas figuras. Una Idea parece revolucionar el mundo de las ideas, consiste ésta en afirmar, por mero efecto de la Razón, que todos lo fenómenos de la Naturaleza descienden de un molde al que llama IDEA ETERNA, de modo que por el sentido aprecia el Hombre el resultado y por la Razón la Idea. Así que lo que está haciendo el Hombre es desde los sentidos trasladarse a la Idea Inteligible para alcanzar la realidad. Esta relación entre Pensamiento y Existencia determina la degradación del Alma en la Tierra, que hallándose vinculada a un Cuerpo precisaba de la purificación para pasar de las Sombras a la Verdad. De las múltiples ideas que el hombre puede proporcionarse para adquirir el Saber, solo la IDEA SUPREMA, causa de todas las demás, es el bien. Esa inserción del Alma en el Cuerpo, que significa pérdida del bien, de la verdad y de la belleza, no evita que el Alma tenga el recuerdo de las mismas y busque el retorno mediante el desprecio del cuerpo y la adquisición del Saber. Este Saber no es estrictamente el propio del conocimiento de la Naturaleza sino la CIENCIA DE LO UNIVERSAL, de lo que es el Eterno, lo absoluto, le esencia, los principios y las causas que generan los fenómenos particulares. La nueva idea admite que todo fluye, en los procesos naturales todo fluye, pero nada cambia, el Eterno no cambia; todo en la Naturaleza fluye pero todo en la Naturaleza es inmutable, siendo posible que los hombres pasen de niños a viejos mientras la idea del Hombre permanece inmutable. Se establece de tal manera una relación, en la Idea, entre lo Eterno y lo inmutable con aquello que fluye dentro del marco preconcebido por lo Eterno. Esto determina la virtud como unos valores que responden a los conceptos de absoluto e intangible, de modo que como destinatario de lo Eterno debe la virtud del Hombre imponerse al mercado social de los valores, debiendo hacer el Hombre aquello que es lo DEBIDO dentro de una doble esfera de entidades ideales y de SER IDEAL.