DOCUMENTO ANTERIOR: 01327 - 01340 - 00747
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http://heroedeherpetol.blogspot.com.es/2013/02/01340-72generalidades-02dios-no-se.html
http://heroedeherpetol.blogspot.com.es/2011/10/00747-33generalidades-01el-alimento-de.html
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DOCUMENTO POSTERIOR: 01597
I: ANTECEDENTES
Hoy se reúne el "estado mayor" de la segunda dictadura más importante del mundo, con el objetivo de elegir PAPAM. Previamente han realizado todos los pertinentes actos de brujería y ocultismo que nada tienen que envidiar a la "masonería", al "oráculo de Delfos", a la liturgia de los arcanos conforme el III Concilio de Toledo o a los tradicionales "chamanes" de cualesquiera confesión o entendimiento., hasta alcanzar el ACTO DE FE fundamental, como es el pedir el auxilio del Espíritu Santo.
El ESPÍRITU SANTO es la tercera persona de la trimurti cristiana. Ya ORÍGENES DE ALEJANDRIA (185-245) trata de tal asunto... en este punto, resuelto el “ser” de Lo Eterno, surge el origen específico de la Tercera Persona de la trimurti y el “ser” que lo define, de tal modo que si se entiende por la Idea del Hombre que todas las cosas fueron hechas por Lo Eterno en cuanto Primera Persona de la trimurti, cabe determinar que la Tercera Persona vino a “ser” mediante la Primera Persona, correspondiendo ser a la Tercera Persona una derivada de Lo Eterno en cuanto Primera Persona, de modo que viene a ser reconocido que la Primera Persona es anterior a la Tercera Persona. Pero, por el contrario, advertir la negación de la Tercera Persona como “venida a ser” a través de la Segunda Persona, quiere decirse que es inengendrado la Tercera Persona, de modo que se negaría, de igual modo, que siendo tres las personas solo la Primera es, específicamente, inengendrada, y habiendo dos seres inengendrados se negaría la existencia de un solo Lo Eterno, por lo que, y no siendo posible esto, se debe admitir que la Tercera Persona es la dignidad máxima y la primera que recibió existencia de Lo Eterno entendido como Primera Persona y a través de la Segunda Persona, de tal modo que no siendo “hijo” la Tercera Persona de la Primera, si pende de ésta. Siguiendo semejante línea de ideación y considerando el Principio de Unicidad en Lo Eterno, todo sale de Lo Eterno, en Lo Eterno permanece y ha de volver a Lo Eterno sin que media posibilidad de abandonar a Lo Eterno. Tal proceso de APOCATÁSTASIS o poner la cosa en su puesto primitivo, restaura el orden, que no perdido en Lo Eterno, muta en el mundo natural, de modo que cuando el espacio y el tiempo tengan su final, todos, sanos y enfermos, esto es, no pecadores y pecadores, serán, de nuevo, uno en Lo Eterno. Para comprender la exactitud de lo antedicho es preciso entender que Lo Eterno es el creador tanto de los seres espirituales como del mundo sensible, que son tales seres, con su libertad, la causa del mal y del bien, ya que son ellos los que deciden entre una y otra posición, sean demonios, hombres o ángeles, ya que la construcción de elementos “fuera” de Lo Eterno acarrea consigo la destrucción de los mismos, de modo que lo que tiene lugar es una restauración del orden primigenio, Lo Eterno, de tal manera que todo el “bien” y todo el “mal” terminan en Lo Eterno pues de Lo Eterno nacieron.
Ahora bien, lo que hacen los CARDENALES es invocar a la TERCERA PERSONA o ESPÍRITU SANTO, en su sentido de origen como “el aliento de Lo Eterno” propio del Judaísmo y en cuanto personificación de la posibilidad de crear, de modo que no es algo independiente y en sí, sino que se entiende como una cualidad de Lo Eterno encaminada a la dirección del Hombre, y en especial de los Ociosos y de los Brujos, por los cuales penetra la idea de Lo Eterno en el común de los hombres, de tal forma que revela e inspira la norma escrita al tiempo que da carácter principal a determinados hombres.
Conforme a todo lo anterior, los Príncipes de la Iglesia invocan al Espíritu Santo con el fin de que la "tercera persona" de la trimurti lance su aliento sobre los CARDENALES, los cuales son el gozne o bisagra sobre los que bascula la Iglesia, de modo que son elegidos por el PAPAM de entre los fieles.
II: DE LOS RESULTADOS DE LA INVOCACIÓN
Ya hemos hablado de como Dios se equivoca al elegir Papam (ver documento 01327 de este índice) y de como Dios no se entera de lo que pasa en casa (ver documento 01340 de este índice), así como de la eterna existencia de Dios sin que pruebe comida alguna, mientras como el Hombre come y se muere (ver documento 00747 de este índice).
Se trata de elegir NUEVO PAPAM, de manera que ha de personarse del Espíritu Santo, quién ha de lanzar su aliento sobre los BISAGRAS, los cuales, a su vez, han de percibir el "aliento" y resolver la designación, a la vista de lo cual queremos entender que la Tercera Persona, por orden de la Primera Persona y con el beneplácito de la Segunda Persona, aporta, con su aliento, el nombre del seleccionado, y que a todos los GOZNES les relata el mismo nombre, de modo que todos los CARDENALES deben recibir igual aliento y el mismo nombre, con lo que el asunto de la designación debería de darse en la primera votación "con llave". Sin embargo, no parece ser así ya que se requieren diversas y reiteradas votaciones hasta alcanzar al elegido.
Surge en este punto una contradicción entre lo que "porta el aliento" y lo que "oyen los PRÍNCIPES", de lo que, y en primer lugar, podríamos deducir que algunos de los BISAGRAS no oyen bien, o bien ignoran "el aliento". En segundo lugar podríamos deducir que oyendo bien los GOZNES, podríamos concluir que el Espíritu Santo menciona, según que CARDENAL, un nombre distinto, lo que nos mostraría que la Tercera Persona duda como consecuencia de que la Primera Persona no lo tiene claro, lo que nos llevaría a entender que DIOS no es perfecto, o bien que Dios no es dios ya que duda.
El ESPÍRITU SANTO es la tercera persona de la trimurti cristiana. Ya ORÍGENES DE ALEJANDRIA (185-245) trata de tal asunto... en este punto, resuelto el “ser” de Lo Eterno, surge el origen específico de la Tercera Persona de la trimurti y el “ser” que lo define, de tal modo que si se entiende por la Idea del Hombre que todas las cosas fueron hechas por Lo Eterno en cuanto Primera Persona de la trimurti, cabe determinar que la Tercera Persona vino a “ser” mediante la Primera Persona, correspondiendo ser a la Tercera Persona una derivada de Lo Eterno en cuanto Primera Persona, de modo que viene a ser reconocido que la Primera Persona es anterior a la Tercera Persona. Pero, por el contrario, advertir la negación de la Tercera Persona como “venida a ser” a través de la Segunda Persona, quiere decirse que es inengendrado la Tercera Persona, de modo que se negaría, de igual modo, que siendo tres las personas solo la Primera es, específicamente, inengendrada, y habiendo dos seres inengendrados se negaría la existencia de un solo Lo Eterno, por lo que, y no siendo posible esto, se debe admitir que la Tercera Persona es la dignidad máxima y la primera que recibió existencia de Lo Eterno entendido como Primera Persona y a través de la Segunda Persona, de tal modo que no siendo “hijo” la Tercera Persona de la Primera, si pende de ésta. Siguiendo semejante línea de ideación y considerando el Principio de Unicidad en Lo Eterno, todo sale de Lo Eterno, en Lo Eterno permanece y ha de volver a Lo Eterno sin que media posibilidad de abandonar a Lo Eterno. Tal proceso de APOCATÁSTASIS o poner la cosa en su puesto primitivo, restaura el orden, que no perdido en Lo Eterno, muta en el mundo natural, de modo que cuando el espacio y el tiempo tengan su final, todos, sanos y enfermos, esto es, no pecadores y pecadores, serán, de nuevo, uno en Lo Eterno. Para comprender la exactitud de lo antedicho es preciso entender que Lo Eterno es el creador tanto de los seres espirituales como del mundo sensible, que son tales seres, con su libertad, la causa del mal y del bien, ya que son ellos los que deciden entre una y otra posición, sean demonios, hombres o ángeles, ya que la construcción de elementos “fuera” de Lo Eterno acarrea consigo la destrucción de los mismos, de modo que lo que tiene lugar es una restauración del orden primigenio, Lo Eterno, de tal manera que todo el “bien” y todo el “mal” terminan en Lo Eterno pues de Lo Eterno nacieron.
Ahora bien, lo que hacen los CARDENALES es invocar a la TERCERA PERSONA o ESPÍRITU SANTO, en su sentido de origen como “el aliento de Lo Eterno” propio del Judaísmo y en cuanto personificación de la posibilidad de crear, de modo que no es algo independiente y en sí, sino que se entiende como una cualidad de Lo Eterno encaminada a la dirección del Hombre, y en especial de los Ociosos y de los Brujos, por los cuales penetra la idea de Lo Eterno en el común de los hombres, de tal forma que revela e inspira la norma escrita al tiempo que da carácter principal a determinados hombres.
Conforme a todo lo anterior, los Príncipes de la Iglesia invocan al Espíritu Santo con el fin de que la "tercera persona" de la trimurti lance su aliento sobre los CARDENALES, los cuales son el gozne o bisagra sobre los que bascula la Iglesia, de modo que son elegidos por el PAPAM de entre los fieles.
II: DE LOS RESULTADOS DE LA INVOCACIÓN
Ya hemos hablado de como Dios se equivoca al elegir Papam (ver documento 01327 de este índice) y de como Dios no se entera de lo que pasa en casa (ver documento 01340 de este índice), así como de la eterna existencia de Dios sin que pruebe comida alguna, mientras como el Hombre come y se muere (ver documento 00747 de este índice).
Se trata de elegir NUEVO PAPAM, de manera que ha de personarse del Espíritu Santo, quién ha de lanzar su aliento sobre los BISAGRAS, los cuales, a su vez, han de percibir el "aliento" y resolver la designación, a la vista de lo cual queremos entender que la Tercera Persona, por orden de la Primera Persona y con el beneplácito de la Segunda Persona, aporta, con su aliento, el nombre del seleccionado, y que a todos los GOZNES les relata el mismo nombre, de modo que todos los CARDENALES deben recibir igual aliento y el mismo nombre, con lo que el asunto de la designación debería de darse en la primera votación "con llave". Sin embargo, no parece ser así ya que se requieren diversas y reiteradas votaciones hasta alcanzar al elegido.
Surge en este punto una contradicción entre lo que "porta el aliento" y lo que "oyen los PRÍNCIPES", de lo que, y en primer lugar, podríamos deducir que algunos de los BISAGRAS no oyen bien, o bien ignoran "el aliento". En segundo lugar podríamos deducir que oyendo bien los GOZNES, podríamos concluir que el Espíritu Santo menciona, según que CARDENAL, un nombre distinto, lo que nos mostraría que la Tercera Persona duda como consecuencia de que la Primera Persona no lo tiene claro, lo que nos llevaría a entender que DIOS no es perfecto, o bien que Dios no es dios ya que duda.
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