lunes, 29 de agosto de 2016

03093-302.EUROPA: 01.Los lazos dependientes: Israel

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       Vivir en el planeta Tierra significa estar sometido a lazos dependientes. Sin embargo durante siglos EUROPA (España y Portugal, Francia, Inglaterra, Italia y Alemania), en sus diferentes épocas de poder, nunca tuvo la sensación de esos lazos de dependencia que hoy existen. Y cuando hablamos de lazos de dependencia, se refiere Cómodo Centón a LAZOS DE DEPENDENCIA FRONTERIZA.

    La FRONTERA actúa, en este sentido, como un lazo de defensivo "frente a", que sin ser propio de Europa, hace posible una línea defensiva europea en cuanto a terceros, y donde se trata de elegir la mejor opción entre dos malas opciones. 

    Un primer caso lo encontramos en ISRAEL, que cómo bien sabemos es ese país que carece de fronteras con Europa pero que es la frontera europea más avanzada, y que se comporta como una "marca" necesaria para una defensa alejada del territorio europeo. 

   Digamos, como punto de partida, que ISRAEL es ese país de judíos que se encuentra en primera línea de combate frente a los moros. Digamos, para satisfacer a ambas partes que judíos y moros son, por igual enemigos de Europa, o bien que son, por igual amigos de Europa, y digamos que una parte de Europa está a favor de los judíos, mientras que está a favor de los moros la otra parte de Europa. 

  Establecidas de tal modo, y en párrafo anterior, la relación amor-odio de las diferentes partes y posiciones, procede la pregunta... ¿quién de los dos, judíos o moros, es peligroso para Europa?, o bien... ¿quién de los dos, judíos o moros, es amistoso para Europa? 

   En general se podría decir, contestando a las preguntas anteriores, que la DERECHA siente tendencia de amistad con los judíos, y la IZQUIERDA tiende a los moros; pero no es del todo cierto ni lo uno ni lo otro. La Derecha siente querencia hacia los judíos salvo en el hecho histórico del dominio judío en el campo de los dineros, ya que los judíos tienden a dominar a Europa mediante la influencia económica, pero no buscan la destrucción de Europa entendida como elemento cultural y religioso. Al JUDÍO no le interesa ni la cultura ni la religión ajena, siempre que esa cultura y religión ajena respete la cultura y religión judía; dicho de otro modo, el judío no es proselitista, no pretende convertir "al infiel". Sin embargo al MORO la conversión de "el infiel" es la esencia de su ideario, de forma tal que expone su tesis públicamente y busca con evidente fervor la conversión de "el infiel" a su idea político-social-religiosa, mientras rechaza de plano la cultura y la religión ajena. 

    Dejemos de lado, evidentemente, que no todos los judíos son judíos ni todos los moros son moros, de modo que establecida tal salvedad, continuamos.

   Si lo dicho hasta aquí es cierto, una progresión mora sobre Europa significa una alteración cultural y religiosa del territorio europeo, mientras que una progresión judía no modifica el territorio cultural y religioso de Europa.  

   Y es a la vista de lo anterior que, cabe afirmar, ISRAEL es la línea defensiva europea, dentro del mundo árabe, y que de caer significaría el último bastión cultural-religioso dentro del mundo moro, lo que acrecentaría la penetración mora en Europa. Un EUROPEO puede ser anti-judío por mera consideración de poder económico (derecha) y puede ser anti-judío por mera consideración ideológica (izquierda), pero en ambos casos ser anti-judío es ser participe de un fin cultural y religioso de la Europa que hoy conocemos, ya que los conceptos de libertad e igualdad sufren mucho si se hacen participes por parte de la actuación coránica. 

    Se trata de elegir, pero sin olvidar el contenido del TEOREMA DEL CÍRCULO de Cómodo Centón, que dice... donde lo que ocurre en un punto del círculo a favor, sucede en contra en otro punto del círculo (ver documento 01180 de 11.10.2012 de este índice)

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