lunes, 12 de octubre de 2020

06064-215.POLÍTICA: 05.El Franquismo: 1959-1975 y la Oposición: La absoluta victoria de Franco.

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06047 (06.10.2020 - 04.El Franquismo: 01.La autarquía de 1939-1957
                                       Proceso de adaptabilidad de Franco)

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06069 (14.10.2020 - Teorema de la Unión)
06070 (17.10.2020 - 06.Franquismo: ¿Quién derrotó y venció a Franco?)


     En los años sesenta se cumplieron los "veinticinco años de paz"; entiéndase, de paz para Franco, que los había, en España, aún en guerra, una guerra en la que fueron derrotados y vencidos, humillados y olvidados. Se podrá pensar lo contrario, pero ese "pensar" es solo poesía.

     La realidad era otra, Franco celebraba los veinticinco años de paz entre el Palacio del Pardo y el Pazo de Meirás, reinando sobre una España que quería no olvidar y otra España que ya había olvidado. 

    El ABRAZO con el presidente norteamericano Eisenhower había legitimado a Franco; en España había una dictadura/legitima que fuera de España era aceptada, una dictadura de la que disfrutaban los europeos democráticos, esos hombres y mujeres libres que llegaron, en bandadas, a España, con sus dólares, sus francos, sus marcos, sus coronas y sus libras, entre otros conceptos monetarios. En España les esperaba un país barato, de costumbres no europeas, de playas y montañas, de folclore, de comida y bebida, una tierra que estaba cambiando, de la que ya emergía una nueva generación de españoles que tenían a la guerra de 1936-39 como un suceso extraño, algo del pasado, de la que hablaban padres y abuelos con distintos contenidos y diferentes relatos. Una España que ya estaba cambiando las zapatillas de esparto por los zapatos, a la que llegaban mujeres liberadas y hombres de escándalo. 

     Todo parecía ser, de nuevo, posible; y fue aparentemente posible porque nuevos españoles habían llegado. El FRANQUISMO realizó unos cambios legislativos que nada aportaron más allá de la dictadura; la Ley de Prensa de 1966, la Ley Orgánica del Estado de 1966, la Ley de Sucesión de 1969.

     La primera baja importante que sufrió Franco fue la renovación de la Iglesia Católica de la mano de Vaticano II, a esto siguió el nacimiento de ETA y el incipiente movimiento independentista catalán, las huelgas obreras y el nacimiento de Comisiones Obreras, así como el acceso de dichas comisiones al Sindicato Vertical. Poco aportó el asesinato de Carrero Blanco ni el Juicio 1001, ni tampoco fue especialmente importante el Tribunal de Orden Público, ni las sistemáticas torturas ejercidas por la Brigada Político/Social. Y todo porque España, a pesar de unos y de otros, había cambiado y se estaba preparando para una DEMOCRACIA. Eran los españoles, sin saberlo, los que estaban cambiando España. 

     A partir de las indicaciones del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI), Franco siguió su proceso de adaptación, ya descrito en documentos anteriores, para mantenerse en el poder, lo que ejecutó con el el Plan de Estabilización de 1959; consistía en acabar con la autarquía y la intervención, recortando el gasto público y reduciendo el déficit, así como devaluando la peseta, liberalizando la economía, abriendo España a las relaciones mercantiles, y permitiendo las inversiones extranjeras. La balanza comercial supuso un superávit de pagos, ya que los ingresos del Estado aumentaron por el turismo y las remesas de los emigrantes, así como la inclusión de España en la Sociedad de Consumo. La consecuencia fue un acelerado crecimiento económico entre 1961 y 1973, truncado por la Crisis del Petróleo de la OPEP, mientras la Oposición, incapaz de derrotar a Franco, se tuvo que conformar con esperar la muerte del dictador. Dicho de otro modo: FRANCO HABÍA VENCIDO.

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