lunes, 23 de octubre de 2023

07795-130.LIBROS: 13.Contribución a Así habló Zaratustra de Nietzsche: 02.Los tres conceptos fundamentales: 02.El Hombre

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07780 (18.10.2023 - 12.Contribución a Así habló Zaratustra 
                                       de Nietzsche
                                  01.Los tres conceptos fundamentales
                                  01.El Hombre)

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07801 (23.10.2023 - 14.Contribución a Así habló Zaratustra 
                                       de Nietzsche
                                  03.Los tres conceptos fundamentales
                                  01.Dios)


       Zaratustra establece qué es un hombre; El HOMBRE es una cuerda tendida entre el animal y el superhombre, una cuerda sobre el abismo, una realidad que el hombre ha de superar superándose a sí mismo, sin pararse y sin temblar, y cuyo destino es pasar al más allá. 

      Previamente establece Stirner que en la sociedad humana es necesario dos niveles de seres humanos, aquellos que mandan y aquellos que son mandados, y augura que en una asociación humana es “el único” quien sustenta la propiedad sobre sí mismo y, por lo tanto, ni manda ni es mandado. Abunda en esto Cómodo Centón cuando manifiesta que la libertad es una realidad que nunca llegará, pues la soberanía de una sociedad es la máquina coronada que gobierna a dicha sociedad humana. Ahora bien, lo que sin duda ignora Nietzsche es que los límites del mundo son los límites del lenguaje, conforme Wittgenstein.

       En la nueva sociedad de Nietzsche encontramos a un Zaratustra que se ríe del Hombre, y que su esfuerzo es enseñar “a los hombres una nueva voluntad”, más, los hombres no tienen los oídos de Zaratustra; "enfermos y decrépitos fueron los que despreciaron el cuerpo y la tierra, quienes inventaron las cosas celestes y las gotas de sangre redentora", de modo que tales enfermos y decrépitos "quieren que se crea en ellos y que la duda sea un pecado", ya que "siempre ha habido muchos enfermos entre los que sueñan y se consumen en Dios", a tales Zaratustra los llama tarántulas, es decir, predicadores y sacerdotes.

       No obstante, el animal más valeroso es el hombre, y por semejante valor ha vencido a todos los animales, siendo así que quién tiene mayor valor es el matador, pues el valor consiste en atacar. El problema de atacar es la decisión de hacerlo, pues todo ataque se posiciona en una encrucijada, esto es, en un determinado instante, ya que los caminos que determina el cruce de los mismos están en contradicción. El enano le manifiesta a Zaratustra que "todo lo que es recto miente", le añade que "toda verdad es una curva" y termina diciendo que "el mismo tiempo es un círculo", lo que enlaza con la idea física de como el espacio es, siempre, curvo.

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