02218-78.ALICANTE: 01.El tardeo, la falsa novedad

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02201 (03.03.2015 - 77.Alicante)

DOCUMENTO POSTERIOR:

02445 (19.08.2015)

                                              -I-

      Hace años, bastante años, CÓMODO CENTÓN EL PADRE al concluir su comida en casa, se levantaba de la mesa, poníase el sombrero y tomaba el bastón, quedando sobre la mesa platos y vasos, cubiertos y servilletas sucios, restos de comida y un mantel sucio. "Me voy" decía a la Centona, y mientras La Centona se introducía en la cocina a limpiar cacharros, y recogía la mesa... El Centón se iba de TARDEO; se acercaba al bar, donde "otros" también hacían "tardeo" mientras "otras", como La Centona, se dedicaban a limpiar platos y vasos, cubiertos y servilletas sucios, sucios manteles, y una cocina alborotada de cacharros sucios, sin olvidar los suelos que siempre contenían migas caídas, así como algún que otro trozo de comida.

     En el bar, Cómodo y otros se tomaban su café, se fumaban su tabaco y, algunos, se jugaban su partida de cartas o de dominó. Al cabo regresaba Cómodo Centón a su casa, donde comedor y cocina ya estaban aseados, y depositaba su cuerpo en el sillón para echarse una siestecita.

    Hoy CÓMODO CENTÓN EL HIJO, así como LA CENTONA HIJA, hacen lo mismo que Centón Padre hacía en otros tiempos. 

    CONCLUSIÓN: para que "unos" puedan disfrutar, tienen "otros" que padecer.

                                               -II-

    El TARDEO es, simplemente, una forma de esclavitud encubierta. Antes, cuando el "tardeo" lo ejercía EL PADRE se consideraba un acto declarado de machismo descarado o patriarcado, ahora que lo realiza EL HIJO es un acto de necesidad social al que se suma LA HIJA. 

     Lo curioso de la "historia" es que  de raíz se ignora, y no es que se repita, sino que continua; cambia el argumentario, de modo que si ayer fue el padre, hoy es el hijo y la hija, lo que NO EVADE el hecho de que hayan MADRES que se vayan de tardeo y dejen al padre recogiendo comedor y cocina. 

    Pero la REALIDAD es otra, pues se ha convertido el "tardeo" en una falsa novedad, convertida en una innecesaria necesidad que, eso sí, da alegría a los bares y llena las terrazas de los mismos de una FAUNA JUVENIL que predica la igualdad mientras hablan de necedades, ya que ni el arte ni la física son parte de las conversaciones. 

                                             -III-

La vida es un continuo descubrir

lo que ya otros ya descubrieron.

Solo que, al tiempo, somos incapaces

de descubrir,

a tiempo,

que ya otros ya lo descubrieron.

De forma que caminamos esforzándonos

en predicar

nuestros descubrimientos, 

hasta que un día descubrimos

que ya otros lo descubrieron.

Más, 

es tarde

y somos viejos.

De "El Principio de la Historia"

Año 1976-1989