05546-199.GENERALIDADES: El proceso evolutivo de las personas

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      De entrada, afirma Cómodo Centón, no existen ni hombres ni mujeres, sino personas, pero las personas pueden dividirse, según para qué, en dos columnas, que son mujeres y hombres.

      Ambos no evolucionan del mismo modo:

     La MUJER madura antes que el hombre; crece de una manera exponencial hasta los treinta años, pierde potencia de madurez durante el periodo gestante y de madre, se hunde entre los cuarenta y setenta años, y renace en belleza a partir de los setenta años. 

    El HOMBRE empieza su tiempo de maduración a los veinticinco años, se mantiene sostenible hasta los cincuenta años, su belleza adquiere esplendor hasta los setenta años, y envejece de forma exponencial a partir de de los setenta años. 

    Dicho de otra manera, la MUJER lo "es" antes de adquirir la condición de casada y vuelve a serlo al adquirir la condición de viuda, mientras que el HOMBRE adquiere su condición de hombre al comienzo de su matrimonio y cuando su matrimonio ha envejecido.