martes, 10 de noviembre de 2020

06135-353.ASIA: 04.Armenia/Artsaj y Azerbaiyán/Nagorno Karabaj: Una guerra empatada

DOCUMENTO ANTERIOR
02839 (03.04.2016 - 01.Nagorno-Karabaj - Armenia/Azerbaiyán)
02951 (04.06.2016 - 02.Nagorno-Karabaj - Armenia/Azerbaiyán)
06038 (28.09.2020 - 03.Nagorno-Karabaj o Artsaj (Armenia/Azerbaiyán)
                                       Otra vez en guerra)

DOCUMENTO ANTERIOR
07120 (13.09.2022 - 07.Guerras Olvidadas
                                  05.Armenia/Artsaj - Azerbaiyán/Nagorno Karabaj
                                       Hostilidades)


I: ANTECEDENTES

Lunes, 28 de septiembre de 2020
06038-350.ASIA
03.Nagorno-Karabaj o Artsaj (Armenia/Azerbaiyán)
Otra vez en guerra

    El RESULTADO es evidente, Azerbaiyán no puede ganar porque Armenia es más potente, y Armenia no puede perder porque cuenta con la ayuda de Putin de Rusia; de momento, Armenia ha alcanzado sus objetivos, ha expulsado a los azeris de su Nagorno-Karabaj, tiene ocupado su Artsaj por entero y una parte/franja de seguridad en territorio de Azerbaiyán. Solo por tales argumentos, Azerbaiyán debería de comportarse con sabiduría y rechazar sus aspiraciones sobre una tierra que, de hecho, siempre ha sido de Armenia.

II: PUES HA GANADO AZERBAIYÁN

      Lo que parecía ser una evidencia, la ganancia de Armenia, ha sido una certeza, la derrota de Armenia. Una vez más el componente de ayuda militar de Turquía y la subsiguiente posición "cero" de Rusia, ha determinado la victoria de una de las dos partes.

     Después de un ataque inicial de Armenia, ha sido contundente la respuesta de Azerbaiyán, que, si bien no ha logrado recuperar, en su totalidad, la zona de Nagorno Karabaj, no le ha quedado más remedio que ceder parte de Artsaj a Armenia.

     La guerra, que Armenia da por perdida, ha servido para que Azerbaiyán no haya logrado recuperar la totalidad del territorio entre 1991 y 1994, pero, a su vez, Armenia no se da por derrotada ni Azerbaiyán se puede dar por ganadora. Sin embargo, ninguna parte acepta la realidad: EL EMPATE. 

    Lo anterior significa que queda pendiente un conflicto sin resolver, una disputa que se aplaza y que, tarde o temprano, volverá a colisionar. 

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