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EL TEMPLO DE SANTA MARÍA es la edificación más antigua de la ciudad de Alicante. Se asienta sobre la antigua mezquita de la Villavieja, que mandó purificar Jaime II de Aragón en el siglo XIV, tras arrebatar, por la fuerza de las armas, la ciudad a Castilla.
La FACHADA principal se estructura en tres puertas con pórticos y dos torres que separan las tres citadas puertas. Las TORRES, de piedra blanca de cantería, son rectangulares y desiguales entre si, conteniendo una balconada cada una, situándose en la torre de la izquierda un reloj, siendo un campanario la de la derecha. Presenta un PÓRTICO CENTRAL, que es el acceso al templo, con dos pisos con un eje vertical que delimita ambos laterales triangulares. El cuerpo inferior tiene cuatro columnas exentas, dos lisas y dos salomónicas, que son el sostén de una cornisa, la cual se curva en medio punto en su parte central, bajo la cual aparece el dintel propio de la puerta a la misma altura que los capiteles de las citadas columnas, esculpiendose ángeles y nubes entre la cornisa y el dintel. El cuerpo superior es más ligero, conteniendo seis pedestales, sirviendo los cuatro exteriores para soportar el peso unas esculturas, y los dos centrales para prolongarse en columnas que soportan una nueva cornisa, de la que arrancan hasta cuatro pináculos, quedando enmedio una hornacina con la imagen de la Virgen, y a ambos lados de este piso dos ventanas. En cuanto a los PÓRTICOS LATERALES son de acceso a capillas laterales del templo.
La PLANTA del templo guarda una relación de 1:2 en cuanto al ancho y largo, siendo la altura de 2:3 del ancho edificado y 1:3 de la longitud de la nave.
En su interior el templo presenta tres naves. La NAVE CENTRAL presenta un suelo con multitud de enterramientos propios de la Edad Media, todo de piedra blanca de San Julián, como el resto de la fábrica, con pilares trilobulares, siguiendo en lo formal el estilo gótico, ya que el ancho de la planta es mayor que la altura, de modo que no existen las tensiones especificas entre los desarrollos vertical y longitudinal, apreciándose arcos ojivales, bóvedas de crucería y una jerarquía entre las columnas de los arcos laterales y los forneros. La iluminación de la nave lo es a través de los ventanales abiertos en el muro sobre las CAPILLAS LATERALES, las cuales serian el resultado de la perforación de contrafuertes, formando capillas que se unen, a su vez, por medio de arcos de medio punto peraltados, que permiten una transición lateral del templo, la cual se detiene en el ábside que impide la circulación completa al no existir deambulatorio. El alzado lateral que da a cada una de las capillas presenta arco fornero sobre el que se sitúa la ventana de iluminación, presentando el techo de las capillas bóvedas de crucería con arcos torales ojivales equiláteros.
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