miércoles, 6 de agosto de 2014

01933-163.MUNDO: 04.Ébola: Y ahora en España

DOCUMENTO ANTERIOR: 01925

DOCUMENTO POSTERIOR: 02003 (09.10.2014)

       
       No ha sido por Ceuta o Melilla (ver documentos 01817 y 01902 de este índice), ha sido por Madrid; en cualquier caso el Ébola ya está en España al modo que lo hacía "el octavo pasajero" hace treinta y cinco años. Antes ya ha visitado Las Indias Occidentales-Usa que en esto de ser los primeros, los indios occidentales de Usa siempre quieren, logran y son los primeros, como en las películas de extraterrestres, donde el alienígena siempre elige a Usa para dominar el mundo; cosas del poder...

       Es cierto que, en sentido estricto, no es un problema como la gripe, que si uno le tose a otro, el segundo se contagia del primero, lo cual no deja de ser un alivio, pero la gripe, salvo error, se cura, mientras que el Ébola no. En esto reside la diferencia. Es cierto también que bien tratado el paciente, se evita la transmisión, que es de lo que se trata, y es cierto, también, que las farmacéuticas deben de estar aplicándose en esto del ébola para que sus acciones incrementen su valor. Aquí, como en todo, son los RICOS los que aportan dinero, entiéndase... no para curar enfermos, sino para ganar dinero. Luego llegaran los POBRES y exigirán la nacionalización de la cura del ébola; es la tradición. 

      Lo cierto es que ÉBOLA quiere conocer mundo (ver documento 01925 de este índice), y que no piensa renunciar a la interculturalidad ni a la alianza de civilizaciones, porque Ébola, como todo ser viviente, solo quiere alimentarse y, en este sentido, lo que desea es conocer la diversidad culinaria del mundo. Hay que agradecer a Ébola que se haya fijado en España, la mejor cocina del mundo, y que quiera probar el "cocido madrileño", porque seguramente su experiencia con la cocina Usa no le haya sido del todo placentera.

    El asunto, lo cierto es, reside en un hecho intrascendente... se trata de quién se come a quién. El Hombre Occidental parece estar tomando, aparentemente, conciencia de la realidad de Ébola, pero no. Los pacientes que han llegado a España lo han hecho en urnas precintadas y rodeados de gentes extrañas, y en un avión civil, aunque del ejército del aire, debidamente preparado, pero la pregunta es... ¿sabrán los próximos usuarios de tal avión que tal avión es el avión de Ébola?

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