02869-216.MUNDO: 09.Petróleo: 03.La muerte de la OPEP: Reunión de Doha (Catar)

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    Catar es un emirato o monarquía absoluta, que tiene un emir que manda, un consejo de ministro que obedece al emir y una asamblea consultiva que no pinta un pelo, donde no hay partidos políticos, salvo el del emir y que solo tiene un militante, el emir. Catar pertenece al Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo Pérsico, del año 1981, donde se agrupan todos los golfos-reyezuelos democráticos de la zona, como Arabia Saudí, Baréin, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Catar y Omán. Dicho Consejo del Golfo se creó para defenderse de los chiitas de Irán o del cura Jomeini.

    Se ha celebrado en CATAR una reunión de la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo), después de los ocultos acuerdos, devenidos a lo largo de marzo-abril de 2016, entre Rusia y Arabia Saudí, para congelar la producción de petróleo.  Tal reunión anunciada como "urgente" (ver documento 02679 de 12.01.2016 de este índice) ha fracasado; pero para llegar a esta conclusión no hacía falta reunirse, con haber leído a Cómodo Centón era suficiente.

   La GUERRA DEL PETRÓLEO se planteó contra USA, contra el proceso de extracción y acceso al ESQUISTO mediante fractura hidráulica. Arabia Saudí, y sus perritos falderos del Golfo, deciden que el "mercado" fije el precio (ver documento 02079 de 28.11.2014 sobre la Reunión de la OPEP en Viena, de este índice), iniciándose  entonces una guerra entre Arabia Saudí y sus sumisos por un lado y por otro lado Rusia, Venezuela e Irán. 

    Por entonces IRÁN era una de las bestias negras del mundo occidental, pero hoy y con los recientes acuerdos sobre la cuestión nuclear, Irán ha entablado cierta amistad con Occidente, lo que debilita la posición dominante de Arabia Saudí. Irán quiere vender petróleo, necesita de tales ingreso con independencia del precio, de ahí que quiera aumentar la producción y las ventas. Esto compromete la situación de Venezuela, que desean un aumento significativo de las ventas que le procure ingresos, y de Rusia que sin embargo podría sostener la actual situación. De ahí el compromiso previo de marzo de 2016 entre Rusia y Arabia Saudí de mantener el índice de producción. 

    ARABIA SAUDÍ tiene un problema: está jugando a potencia internacional, cuando no lo es (ver documento 02648 de 20.12.2015 de este índice, sobre La muerte de la OPEP). Pero ahora sus problemas aumentan; solo le sigue los países del Golfo Pérsico, lo que la deja en minoría dentro del amplio margen de los países productores. Mantener la producción está en su interés, pero ya excede de los intereses de otros miembro del Golfo, y sobre todo de otros miembros de la OPEP; y aquí es donde nace la ruptura de la OPEP. 

   La comprensión de todo lo anterior se concentra en las palabras del príncipe Mohamed bin Salman de Arabia Saudí... "Si los principales productores no congelan la producción, nosotros no lo haremos, y si no congelamos la oferta, venderemos en todas las oportunidades que tengamos".

   Dice Cómodo Centón que sí lo anterior se cumple, los beneficiarios serán las Haciendas Públicas de los países no productores, ya que aumentará la oferta y se mantendrá la demanda, lo que llevará a una caída peligrosa de precios en un mercado donde todos estarán contra todos. 

   A lo anterior hay que añadir el odio que enfrenta a Irán-chiitas con Arabia Saudí-sunitas, actualmente enfrentados en la Guerra de Yemen (ver documento 02474 de 07.09.2015 de este índice, sobre Yemen).