02697-38.IMPOSIBLES: 02.¿Dónde está el Padre Naturaleza?

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      Fue un día de apocalipsis aquel que tuvo lugar aquel día Cómodo Centón. Se le reveló, aquel día, acaso por la mano invisible que todo lo mueve y que solo es un invento de la ignorante razón humana, como una mano muy larga que salía de los ojos y tocaba los objetos, de modo que donde no llega ni la naturaleza ni el hombre, llega la mano invisible, lo que hacia posible que el hombre, por sus ojos, viera. ¿Y qué veía el hombre por sus ojos?

    Respondió El Centón... a la naturaleza. 

    ¿Solo a la naturaleza?, la naturaleza de las cosas, que son su esencia. 

    Aquel día, no recuerdo haberlo dicho, fue un día de patentizar que, efectivamente, existía la Madre Naturaleza, todo era naturaleza, la física y el pensamiento eran naturaleza, y una mano muy larga distinguía un extenso de otro extenso sobre el éter inexistente depositados. Tal manifestación, de lo hasta aquí dicho, no se asentaba en la insólida realidad de Cómodo. ¿Quería decirse que para generar vida tan solo era suficiente lo femenino?

     ¿Sí lo femenino era suficiente, para qué lo masculino? 

     No pudo Cómodo Centón articular palabra alguna, más convino consigo mismo que lo natural, excepciones a la regla, era que sí bien la naturaleza era femenina y se llamaba Madre, lo antinatural era masculino y se llamaba Dios.