martes, 26 de enero de 2016

02705-19.POLÍTICA: 03.¿Qué es Corrupción?: 02.Concepto

DOCUMENTO ANTERIOR
02687 (17.01.2016 - 17.POLÍTICA: 01.¿Qué es Corrupción?: 01.Concepto)
02692 (18.01.2016 - 18.POLÍTICA: 02.¿Qué es Corrupción?: 01.Teoremas)

DOCUMENTO POSTERIOR
02717 (30.01.2016 - 04.¿Qué es Corrupción?: Por dinero,influencia y pensamiento)
02727 (05.02.2016 - 05.¿Qué es Corrupción?: 01.Ejemplo María Bárcenas)
02841 (04.04.2016 - 06¿Qué es Corrupción?: 01.Papeles Panamá)
03134 (14.09.2016 - 15.¿Qué es Corrupción?: Perdón... usted es impoluto: Rita, Demetrio y Luis)
03339 (25.12.2016 - 16.¿Qué es Corrupción?: Cargo Electo y Cargo Actual)
03560 (20.04.2017 - 19.¿Qué es Corrupción?: La corrupción es de todos)


      ALBERT EINSTEIN hablaba de un cubo formado por varillas, al cual, se les unían otras varillas, formaba, junto al primero, un segundo cubo, y si a los dos dichos cubos se le añadían más varillas, terminaba formándose una estructura de cubos, finitos cada uno de ellos, pero infinitos en su número. Añadía que lo que sucede en uno de esos cubos es referencia para el resto, (ver documento 00507 de 23.03.2011 de este índice).

    La CORRUPCIÓN sigue, en todo, lo antedicho. Se dice en la Evolución de Las Ideas de Cómodo Centón como en la felicidad impera, como deriva, las reglas personales, “no hagas a los demás lo que no quieras que te hagan a ti”, quedando relegadas las leyes morales del grupo humano, se trata de vivir el momento como si el antes y el después no existiesen, sin temer a Lo Eterno, de tal manera que puede la Persona creer en Lo Eterno pero vivir como si el Eterno no existiese; he aquí una variante de ATEISMO en un sentido muy amplio, pero como tal negación de Lo Eterno, en cuanto vida y existencia, hace referencia a la “materia”. Si se cree en Lo Eterno pero se prescinde de Lo Eterno en cuanto vida y existencia humana, la MATERIA, nos dice la Idea del Hombre, puede ser expresada como una forma corrupta, como un modo explícito de deformación de la realidad, ya que lo CORRUPTO puede ser una expresión de felicidad encubierta. Todo cuerpo que pasa de vivo a muerto se corrompe, apareciendo en su corrupción seres que prosperan y que, por tanto, “son felices”. Sin embargo la aparición de tales seres que viven de la corrupción puede acontecer antes de la muerte del cuerpo, de modo que puede existir corrupción en vida. No se puede negar que tanto lo primero, corrupción tras la muerte, como lo segundo, corrupción en vida, son procesos naturales. Por otra parte no se puede negar por todo buen creyente en Lo Eterno que toda materia es hija de Lo Eterno, de manera que el derecho de vivir hay que extenderlo tanto a lo que favorece al Hombre como a lo que perjudica al Hombre.

       Sin embargo, ni sentimientos morales ni mano oculta, el Hombre es un ser corrupto que vive en una sociedad artificial, donde predomina la desigualdad y genera males. Tal evolución de la posición humana sobre la Tierra parte de un origen natural donde el Hombre vivía conforme a las leyes naturales, esto es, aislados, excepción hecha del periodo de fecundación y crianza, periodo que la unión de hombre-mujer producen la constitución de la familia y su desarrollo, donde los hijos precisan de los padres hasta que se vuelven seres aislados y, por lo mismo, se rompe el vínculo familiar. Nos presenta la Idea del Hombre en este punto la existencia de un Hombre no corrompido y, por lo tanto, autosuficiente, fuerte y sano, dentro de un mundo donde las desigualdades penden del estado físico de los hombres aislados. En tal estado natural el Hombre responde a pasiones y a impulsos, en especial el de la conservación personal, donde impera la satisfacción de las necesidades que impone la naturaleza, así como a la piedad, al constituir el vínculo familiar, cierta capacidad de identificación con los demás en virtud de la identificación animal que el Hombre guarda con otros animales.

    Pero el Hombre dispone de rasgos específicos que lo arrancan de ese estado de identificación animal, siendo el primero de ellos el relativo a la LIBERTAD NATURAL que permite al Hombre romper la regla natural e imponer sus propias normas, y el relativo al AUTOPERFECCIONAMIENTO que permite modificar su comportamiento más allá de lo estrictamente animal. Se parte, pues, de un principio de comportamiento natural que ni es bueno ni es malo o es bueno por naturaleza ya que a la misma se adecua en su ser el hombre, y se desarrolla dentro de un proceso social que vuelve “malo” al Hombre dentro de una sociedad de vicios, corrompida en sí misma, donde el hombre es un lobo para el hombre. En la SOCIEDAD recién adquirida el Hombre adopta las ventajas de la unión donde el común de varios defiende los intereses de todos. Genera esto lazos afectivos, nuevas pasiones, la familia es el centro, la posesión conyugal, el orgullo de pertenecer se instaura, la transmisión de la posesión, el trabajo, la rivalidad, y la inseguridad produciendo desigualdad que da origen al gobierno, a la ley y al Estado, todo lo cual acrecienta la desigualdad, aumenta la injusticia, da lugar a las clases sociales y encierra la libertad del Hombre.

     La LIBERTAD ha sido defendida en diversas ocasiones por la Idea del Hombre, y ya hemos visto como su encaje jurídico ha sido la defensa de la misma en cuanto a la conservación de los derechos jurídicos básicos, de manera que el Hombre no puede sufrir restricciones en el ejercicio de la libertad, de tal modo se pasa del “estado y derecho natural” al ESTADO CIVIL de una sociedad artificial. Se impone el volver atrás o Estado Natural pero sin renunciar a la Sociedad, de ahí que se deba crear un nuevo tipo de organización política que aúna ambos estados con lo mejor de cada uno de ellos, de modo que el Hombre pueda vivir en sociedad y sometido a sus leyes dentro de la naturaleza, que recibirá el nombre de CONTRATO SOCIAL y donde el Hombre somete su voluntad a la voluntad general, la cual establece leyes entre iguales que conduzcan al bien común; no se trata de la mayoría, tampoco de la unanimidad, sino una yuxtaposición de intereses particulares. De tal modo nos encontramos ante un sistema moral y colectivo que permite al Hombre acatar la voluntad general mediante una estructura política que legisla en virtud de la soberanía residente en la voluntad general.

      La SOBERANÍA es, nos dice la idea del Hombre, inalienable e indivisible, de manera que si el “pueblo” deja en manos de unos representantes la capacidad de decidir por él, pierde el “pueblo” su libertad al perder su capacidad de decidir, de modo que el “pacto” entre iguales se rompe. La VOLUNTAD GENERAL se impone cuando es una y mantiene a la Soberanía indivisible, de ahí que la separación de poderes, ya vista en páginas anteriores, no sea la adecuada en una sociedad entre iguales, ya que si la ley emana del poder legislativo, ni el judicial ni el ejecutivo pueden declararse independientes, ya que ambos han de soportar la soberanía de las leyes, uno ejecutándolas y el otro juzgando a los hombres. Dentro de todo el entramado expuesto pierde el Hombre ciertas ventajas que tenía en su “estado natural” pero gana aún mayores ventajas en el “estado civil”, ya que de una posición animal pasa a una igual civil que le permite detentar derechos no contemplados en el orden natural.

    El Hombre no es un ser egoísta, vive en un mundo egoísta cuyo concepto del capital no es compatible con el altruismo, pero no admite la Idea del Hombre que ese egoísmo competitivo que se entiende como beneficioso para la sociedad sea el elemento de una auténtica sociedad. Lejos de ahí, es posible construir una sociedad de sentimientos altruistas basada en la piedad, la cual sería la consecuencia de una EDUCACIÓN no basada en relaciones de egoísmo y que propiciasen la bondad natural que yace en el hombre. Sin embargo el HOMBRE LIBRE responde a un especial concepto que lo relaciona con la propiedad, de modo que en una comunidad de hombres libres no tienen cabida aquellos que no posean propiedad alguna, y se abunda en un concepto de NACIONALISMO que contempla que todo hombre ha de ser educado para no ver más que patria. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario