miércoles, 22 de marzo de 2017

03495-03.NOTAS PARA UN IMPOSIBLE MANIFIESTO ANARQUISTA: 02.Conceptos

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Nos hallamos, pues, ante el primer obstáculo conceptual. La primera consideración del Hombre sobre si mismo es comprender y admitir que el Hombre nace de un mero Acto de Fe, es decir, de un Pensamiento. Ahora bien, el Hombre en el Núcleo no piensa, y no piensa porque ya todo lo tiene pensado, de modo que el Pensamiento en el Hombre en el Núcleo es el mismo Yo del Hombre, Soberanía, es decir, Gobierno; dicho de otro: Anarquía. Es cuando de Núcleo pasa a Núcleo Central y pisa la Espiral abandonando el Circulo, que el Hombre pierde su Pensamiento y piensa como pisar la Espiral, de modo que el PENSAR es una carencia, y comienza el Hombre a pensar para proporcionarse un pensamiento. Todo lo cual anterior es una evidencia si pensamos que cuando el pensamiento está formado se deja de pensar. Para el Pensar el pensar carece en si mismo de valor, adquiriendo valor el Pensar en la medida que genera pensamientos, los cuales inciden, a su vez, tanto en la propia formación de ideas y representaciones que la mente del hombre proporciona a su entendimiento, como el juicio, la decisión y el propósito que decanta. 

Al dejar de ser Pensamiento e iniciar el proceso del Pensar, se conocen por el Hombre los TRES PENSAMIENTOS INVENTADOS: dios, libertad y desigualdad. El Hombre ya no es Pensamiento pues piensa, y tiene que deducir, en primer lugar, qué hace en aquel lugar al que hemos llamado Espiral; éste ha de ser en lo sucesivo su campo de trabajo. Piensa, a la vista de lo anterior, que su presencia en la Espiral tenga un antecedente, y piensa, a la vista de la evidencia, que tal antecedente lo es fuera del Hombre y superior al Hombre, ya que no cabe, en su pensar, imaginar algo que no sea cierto, de modo que es posible que el primer pensar sea el pensamiento de dios, al que llamamos Imagen Divina. Tal pensamiento es plausible ya que permite al Hombre entenderse como justificación de si mismo en cuanto a la inherente incapacidad del Hombre en reconocerse como un ser único y, por tanto, responsable. Ahora bien, si hay un ser superior el Hombre es, por definición, irresponsable, ya que la Espiral, es decir la creación de la naturaleza, es obra de otro, un otro superior que es, a la vez y ante todo, origen y destino, creador. De este modo entendemos que el Hombre es responsable en el Núcleo e irresponsable en la Espiral, pues cuando el Hombre pisa la Espiral, ésta ya figuraba como puesta por el Superior, que resulta ser un Pensamiento Inventado por el Hombre y explicado por su irresponsabilidad. Este Primer Pensamiento Inventado, el Superior que crea la Espiral para el Hombre, se adapta fielmente al concepto de irresponsabilidad del Hombre, ya que la deriva de la vida es ajena al Hombre, lo que no sucedía en el Núcleo. Es decir, el Hombre adquiere irresponsabilidad como mecanismo de defensa, justificación, para el derrame de argumentaciones que le proporcionan razón en la razón. En este sentido la idea de DIOS es solo un pensamiento inventado, que ayuda al Hombre a ejecutar un destino cuyo responsable no es el Hombre sino la Imagen Divina, que, a su vez, no lo es sino que lo es el devenir tragicómico de la existencia, la Historia. La inducción resultante es un camino de penalidades, más o menos aceptadas, que marca dos sendas: la del bien y la del mal; dualidad de resultados. Quiero significar que dios es una idea, es decir, no es una forma ni física ni espiritual, de ahí que como idea que es deba ser escrito con minúscula, al igual que escribo con minúscula metafísica o mi pluma. Pero escribo Dios con mayúscula cuando lo refiero como concepto. 

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