viernes, 31 de marzo de 2017

03518-81.CINE: El bar

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     EL BAR es una película de intriga, española del año 2017, de 100 minutos de duración, dirigida por Alex de la Iglesia, quién comparte guión con Jorge Guerricaechevarría, fotografía de Ángel Amorós, música de Carlos Riera y Joan Valent, interpretada por Blanca Suárez, Mario Casas, Secun de la Rosa, Carmen Machi, y Jaime Ordóñez entre otros.

     La película empieza con PLANOS de tres trávelin continuados de retroceso sobre tres personajes que se cruzan, saltando la cámara de personaje a personaje, dentro de un gran plano general que recoge el ambiente de una poblada calle a un plano general que iguala ambiente más personaje, que retoma al primer personaje, con el que, mediante plano de tres cuartos, sitúa al espectador dentro de un bar. Termina con un primer plano del personaje, pasa a plano de figura entera, sigue ampliando campo hasta un plano general con abundancia de población, para concluir con un trávelin de retroceso sobre el personaje, y un plano general donde, de nuevo, se iguala el ambiente y personaje. Entre principio y final abundan los primeros planos, en menor cantidad los planos de detalle sin especial carácter significativo y los planos medios sobre personajes solos y en grupo, donde se muestra la acción de los personajes. 

    El RODAJE se circunscribe al interior de bar y a una balsa con agua. Las ANGULACIONES responden a una mezcla entre horizontal y oblicua, con algún picado con su contrapicado correspondiente. El RITMO es rápido, presenta breves acelerados con contenidos intensos, y se acompaña de una MÚSICA de jazz al comienzo sobre un fondo expansivo de animales primitivos, que deriva en una expresión agitada de mero acompañamiento. La FOTOGRAFÍA responde a colores ambientales, blanco, amarillos y negros mezclados, sin que sea relevante el material artístico, con una ILUMINACIÓN basada en un compendio de claro-oscuros, luces que moderan la visión y luces complementarias que fijan los fondos.

    Sin valor el VESTUARIO, bien trabajada la PELUQUERÍA, y mejorado el MAQUILLAJE así como la caracterización. La NARRATIVA presenta algún desajuste con la realidad, con DIÁLOGOS previsibles y escenas que permiten al espectador adelantarse a los acontecimientos, dentro de un GUIÓN siempre condicionado a secuencias violentas y agresivas que buscan resultar desagradables y escatológicas, bastante irreales y forzadas, en un campo de DIRECCIÓN obsesionado por lo estrafalario y, en cierto sentido, desordenado, destacando una escatofagia de imágenes más mentales que reales, que deja en manos de los ACTORES cierta parte de la dirección, actores que cumplen adecuadamente dentro de sus correspondientes capacidades, con un MONTAJE bien planteado.

    El BAR cuenta una DOBLE HISTORIA; por una parte la relación "estado-sociedad" en cuanto a los engaños que sufre la sociedad por el estado, y que se reflejan fuera de bar; por otra la relación "individuo-individuo" en cuanto a los enfrentamientos entre personas, y que se reflejan dentro del bar. Ambas historias caminan y se desarrollan en paralelo, y tal vez sea ésto lo mejor de la cinta, de forma que sí bien en algún se enlazan mediante una tangente que las une, no consta una relación real entre ambas de manipulación político-social aunque sí de supervivencia. 

    Cómodo Centón quisiera recomendar esta película, en su fundamento no apta para todos los públicos adultos, pero no ha de recomendarla por si acaso su recomendación es censurada por su inadecuada recomendación a cierta parte del público adulto que, al cabo, solo verá violencia por violencia, despropósito por despropósito.

1 comentario:

  1. jajaja entonces no se si se recomienda o no!!! Habrá que verla!!!

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