DOCUMENTO ANTERIOR: 00501 - 01418
DOCUMENTO POSTERIOR: 01521 - 01733
I: CONCEPTOS PREVIOS
Después de toda guerra, la destrucción imperante deviene en construcción, de manera tal que los gametos de sexo diferente producen un cigoto que por segmentación y consecutivas mitosis originan blastómeros que conforman la mórula y evolucionan a blástulas, y que en un proceso subsiguiente dan lugar a la existencia de un cuerpo complejo que, definitivamente, muere. Sin embargo llega un punto en que el buen vivir retrotrae la necesidad de producir nuevos cigotos, de manera que la población existente deja de reproducirse y se colapsa en sí misma.
II: DE LA BURBUJA INMOBILIARIA
Después de la Segunda Guerra Mundial quedó JAPÓN arrasado y falto de gametos masculinos, lo que hizo posible un desarrollo de la base de los cigotos y de la construcción extensiva. El crecimiento de Japón fue del 10% en la década de los años 1960, del 5% en la siguiente y del 0% al llegar de la década de 1990. En este periodo el empleo japones era fijo, los precios, como resultado de la construcción, eran elevados y el colapso del sistema como consecuencia de la burbuja inmobiliaria era un hecho. De pronto Japón se encontraba ante un problema de liquidez.
La misma consecuencia, aunque por otros motivos, tuvo la crisis economica en USA a partir de 2006 y su posterior extensión a EUROPA, y en todas encontramos a la BURBUJA INMOBILIARIA como cigoto reproductor de un problema de liquidez.
III: EL DÉFICIT Y LA DEUDA
La respuesta, en todo caso, inmediata.... GASTO PÚBLICO elevando deuda y déficit, en la confianza que propiciase dicho gasto una regeneración economica dentro de una inflación controlada. Solo que no habiendo una "guerra" que aliviase el indice de población y existiendo una población incapaz de renunciar a su "buen vivir", ese "gasto público" no producía una contrapartida de "consumo privado" ya que el empleo fijo se había difuminado en un imposible mundo de pensiones, un desempleo ascendente, un trabajo a tiempo parcial, y una falta de regeneración poblacional. Mientras, en el horizonte, se gestaba la DEFLACIÓN o la ausencia de crecimiento.
IV: ENTRE RECORTAR Y ENDEUDARSE
He aquí los dos extremos. EUROPA, siguiendo la senda de Alemania, ha optado por el RECORTE, el cual consiste en gastar menos, disminuir las inversiones y pagar la deuda. Tal proceso consiste en realizar la "travesía del desierto", donde unos recordaran los tiempos de la abundancia, otros padecerán sed durante toda su vida, y otros más afortunados conocerán el fin de las lindes de los padecimientos. El dinero se vuelve escaso, cae el consumo y por tanto el precio de los bienes, lo que lleva a la deflación, esto es, al estancamiento económico, y como consecuencia de la falta de actividad una disminución de los ingresos fiscales y una imposibilidad de devolver la deuda, lo que conduce a la quiebra.
USA y JAPÓN deciden alejarse del desierto, la primera porque no quiere pasarlo y la segunda porque lleva quince años de travesía, y toman la senda de las arenas movedizas, donde, por una parte se niegan explicitamente a los "recortes" aunque los realizan en forma de trabajos a tiempo parcial y temporales que conllevan bajos salarios y falta de consumo, y por otra parte se compran así mismos dinero con dinero que previamente ellos mismos han fabricado; en español sería... yo me lo guiso, yo me lo como. Esta segunda opción, ENDEUDARSE el Estado consigo mismo, permite inflar el mercado con dinero (ver documento 01399 de este índice) con la intención de recuperar el consumo, lo que produce inflación en los precios y un aumento del dinero en circulación que, a su vez, pierde valor en sí mismo, de modo que para no entrar en estancamiento económico precisa el mercado de nuevas aportaciones de dinero por endeudamiento que, finalmente, se presenta imposible de pagar y conduce a la quiebra.
V: LA ESPIRAL DE LA QUIEBRA
El MUNDO, tal como hoy lo observamos, se encuentra dentro de una espiral que por su intrínseca humanidad conduce a la muerte del sistema. Se han suprimido las guerras, fuentes indiscutibles de destrucción que conducían a la construcción, y fuentes de regeneración poblacional como consecuencia de la mortandad resultante de la lucha. Se ha extendido la esperanza de vida, lo que ha dado lugar a un aumento de las pensiones, y se ha distendido la procreación, lo que hace disminuir los ingresos fiscales, pero no se ha extendido la vida laboral en proporción a la esperanza de vida.
Dicho de otro modo, se ha violentado la rotura de la ESPIRAL DE LA QUIEBRA, que antes se hacía mediante guerras periódicas y una baja esperanza de vida.
VI: SOLUCIONES
Son varias... una guerra, una
revolución, la quiebra, el fin del mundo, o bien "pagar", es decir,
la miseria, la desesperación, el suicidio y el patético recuerdo de que
cualquier tiempo pasado fue mejor.
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