01160-133.HISTORIA DEL MUNDO: 04.Afganistán: trabajo y burca

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      La MISERIA de un pueblo se asienta en su propia incapacidad para generar empleo, de modo que cuando se acepta por un pueblo el dinero de un extranjero, lo que ese pueblo está haciendo es vender su suelo. De igual modo, cuando un Hombre no es capaz de crear una empresa, se somete a la dictadura de aquel que es capaz de crear la empresa (véase documento 00986 de este índice)

      AHORA BIEN, hay que recordar que, en ocasiones, el anterior párrafo no es cierto, y no es cierto si atendemos a los casos de Alemania y Japón tras la Segunda Guerra Mundial; aunque bien podemos entender que Alemania y Japón sean las excepciones que confirman la veracidad del párrafo anterior, ya que tras la DERROTA y la RUINA, tanto de alemanes como de japoneses, supieron evidenciar su fracaso y crear su futuro mediante el TRABAJO, cuando USA introdujo en ambos países ingentes cantidades de dinero. 

     Lo de AFGANISTÁN es tercermundismo en estado puro; una realidad muy extendida entre, posiblemente, dos tercios de los países que hoy cubren el mapa mundi, para los cuales prevalece la "cultura" por encima del "trabajo", el "odio" hacia la riqueza ajena por encima del "esfuerzo" personal, el "poder" sobre la familia por encima del "desarrollo" familiar, la "creencia en dios" por encima de la "vitalidad del hombre". 

    Una INVERSIÓN se puede hacer si hay dinero y trabajo, pero para obtener "dinero" es preciso realizar "trabajo". INGLATERRA tiene dinero, contrata con empresas inglesas unas obras en Afganistán, emplea a trabajadores ingleses y contrata con empresas inglesas, de lo que se deriva que las ganancias inmediatas de las obras inglesas en Afganistán implican, de momento, negocio para Inglaterra, para los trabajadores ingleses y para los empresarios ingleses; he aquí el concepto de PROGRESO. 

    AHORA Inglaterra está haciendo las maletas, se va de Afganistán, y allí deja las obras que levantó en su día conforme ha sido explicado en el párrafo anterior; solo que esas obras no han tenido un mantenimiento de futuro, sino que han conocido  un mantenimiento de presente. Hablamos de hospitales y escuelas. Cuentan las CRÓNICAS que las "instalaciones fueron construidas como parte de una estrategia militar destinada a ganarse los corazones y las mentes de la población afgana, y tratar así de socavar la creciente influencia de los talibanes"..., y además dicen las crónicas que "si la población se beneficiaba de las bondades del progreso que acompaña a la democracia, sería menos vulnerable a la penetración de la retrógrada y medieval ideología talibán"

    No dudamos de la listura de los ingleses, que "listos" son, pero la "soberbia ilusión" inglesa de la "crónica" anterior muestra, sencillamente, que además de "listos" bien nos toman por tontos, bien son, además, "ignorantes". Porque AFGANISTÁN es la tierra que inventó el BURCA de la mano de un MORO LISTO que tenía un serrallo, que tenia la propiedad de las mujeres, y que disfrutaba de ellas solo viéndolas él. La NOBLEZA DEL MORO LISTO se apuntó a la moda del harén, y por imitación de querer lo que tenia el "moro listo" se sumaron los MOROS LISTOS-POBRES. Dile ahora a los BURCANIANOS que tienen que elegir entre el burca y el progreso, y adivina qué eligen. 

   La HIPOCRESÍA OCCIDENTAL consiste en defender todas las culturas, todas las civilizaciones, todas las costumbres, al tiempo que las delata como bárbaras, como depauperadas, como atrasadas y, por tanto, como moralmente, objeto de ser cambiadas a la luz de la democracia. El Moro-Listo, la Nobleza-Lista y el Moro-Pobre no están dispuestos a cambiar "su poder" por algo tan extraño como es la democracia.