martes, 8 de octubre de 2013

01600-24.EL VIAJERO MADURO: 02.El Barrio de Alicante

DOCUMENTO ANTERIOR: 01598

DOCUMENTO POSTERIOR:  01606


          La calle San Antonio enlaza con con la calle San Rafael, y en el encuentro de ambas nace una escalera que asciende siguiendo el antiguo Barranco del Carmen hasta la cabecera del mismo. Al coronar la escalera verás al norte la Fortaleza de Santa Bárbara, al oeste la muralla del siglo XII y al este una explanada con un fortín. Si te fijas en la muralla que baja verás que llega hasta la Ermita de la Santa Cruz, pero que a la altura de la curva de nivel de donde te encuentras se abre en la base de una torre. Imagina que desde aquel punto arranca el muro hacia a esa explanada en la que te encuentras y que en la planicie que ya pisas se levanta un torreón cónico, en el mismo punto donde se encuentra un fortín, desde el cual, imagina sigue la muralla hacia el este cerrando el recinto urbano. Te encuentras, Viajero, en el área que era mora cuando Alfonso El Sabio de Castilla toma Alicante; te encuentras en LA ERETA, una planicie irregular que se destinó a "era" por los habitantes, hasta mediados el siglo XIX, de las casas próximas, y donde estuvo el fuerte de Mich Armut. El espectáculo es absoluto, pues prácticamente la mayor parte de Alicante se postra ante tu mirada; disfruta de la estampa.

         De seguido, y junto al fortín, encontraras una sucesión de amplios escalones que bajan: apenas unos diez de esos escalones te dejaran ante una pequeña joya como es un trozo del lienzo de la MURALLA DEL SIGLO XII; esta posición te dará una idea más clara porque es la línea divisoria entre el Alicante moro y el cristiano. Sigue bajando y llegaras al PASEO INFERIOR que corre por detrás de las casas, hasta que tengas la oportunidad de bajar a la calle MUCHAMIEL primero y NAVÍOS después, donde podrás imaginar abierta la Taberna del Navío y a Toni el Vilero en ella sirviendo allá por la mitad del siglo XIX, para llegar a la calle de SAN ROQUE, santo de las enfermedades, que salvara a los alicantinos de una epidemia por la mitad del siglo XVI, y que tiene en su principio la ERMITA DE SAN ROQUE levantada en 1559, reconstruida por el Gremio de Albañiles en 1787, demolido en 1869 y reconstruido bajo la dirección del arquitecto José Guardiola y patrocinio de Alicante, añadiéndose una casa adosada que ocuparon las Siervas de Jesús en 1886 y hasta 1940. La ermita tiene referencias medievalistas tanto en su exterior como en su interior, con tres bóvedas de aristas y capillas laterales, donde destaca la torre por su configuración y remate, siendo cuadrada y abierta en sus cuatro caras, apreciándose contrafuertes y una gran puerta de entrada lateral. Por aquí, y desde La Ereta, corría la muralla medieval que seguía por la actual calle de LEPANTO que se estrecha hasta llegar a la PLAZA DEL PUENTE, que es la más antigua de Alicante y área de la población mora en el siglo XII cuando la ciudad se tornara, por conquista, cristiana; en ella hubo un acueducto que recogía el agua caída sobre la montaña, y un baluarte con seis piezas de artillería, y se encuentran en la actualidad los POZOS DE GARRIGOS, situados en la antigua calle Cueva del Horno del siglo XVIII. Se componen los pozos de tres aljibes con una capacidad de 500.000 litros de agua y construidos en 1865 por Antonio Garrigos, quién añadió una tubería que llevaba el agua hasta la calle Mayor ángulo con la calle Maldonado, donde era vendida. A la plaza continua la calle de SAN JUAN que recibió tal nombre en el siglo XVIII y como consecuencia de existir allí una cofradía dedicada a tal santo. El conjunto Plaza del Puente-Calle de San Juan es la ubicación exacta de la ciudad mora y por lo tanto se presenta como la parte origen de Alicante.

     Baja Viajero, a la altura del actual colegio de San Roque, a la Villavieja y llega a la calle de VIRGEN DEL SOCORRO que es un desmonte sobre la ladera del Benacantil, asegurado mediante un pretil, y que permitía la entrada y salida de la ciudad por la Puerta Nueva a través de una alameda. El lugar se convirtió, extramuros, en un arrabal que fue JUDERÍA hasta la definitiva expulsión de éstos, sentándose en las casas de la zona los pescadores de Alcocó. Desde tal lugar podrás contemplar extensa la Playa del Postiguet e imaginar sobre el agua los doce balnearios que allí existieron más allá de mediado el siglo XX. Regresa sobre tus pasos y podrás con tu imaginación la PUERTA NUEVA y junto a ella la torre de San Sebastian al inicio de la calle Villavieja. Baja por la calle de JUAN RICO, franciscano que fuera diputado a cortes liberales en 1820 y que hubo que emigrar ante el poder de Fernando VII, hasta el PASEITO DE RAMIRO que ocupa el espacio de los Baluarte del Espolón y de San Bartolome, ambos del siglo XVI  y donde podrás ver los restos del tercer amurallado de Alicante. Antes se le llamo Plaza-Jardín del Teniente Luciañez en 1940 y también de la Baronesa de Satrústegui en 1920. Mira especialmente la fachada del Templo de Santa María, sobre el que podrás observar diversos huecos productos de los cañones ingleses en 1706 y dos balas de dichos cañones que aún permanecen atrapadas en la pared. Sigue por la calle de JORGE JUAN que fue un vial notable. En ella tuvieron casa el Marqués de Beniel, el Conde de Casa Rojas, Conde de Santa Clara y el Marqués de Rioflorido, su sede la tuvieron el Gobierno Civil de la Provincia y la Diputación Provincial. Fue conocida como La Palmereta, pues en ella hubo una palmera, y llamada de La Escalera de Santa María, que es por donde deberás subir a la Plaza de Santa María.

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