00097-3. LA NUEVA BENEFICENCIA: del tránsito de la ayuda

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A la vista de todo lo anteriormente dicho, podemos establecer como LA NUEVA BENEFICENCIA es ayuda, y es así conforme a una doble vía. AYUDA es la aportación inmediata, agresiva, violenta y descarnada que el Mundo Actual ejecuta sobre una desgracia; un terremoto, un volcán, las consecuencias humanas de una guerra, el hambre..., de modo que ante estos acontecimientos de carácter extraordinario pero normales renace formal y espóntaneamente un conccepto de solidaridad durmiente, que se presenta como ya descansado y plenamente activo para un leve y reducido periodo de espacio-tiempo.

La AYUDA ESPONTANEA es en origen históricamente el resultado de un esfuerzo personal que deriva en social, para transformarse en una AYUDA FORMAL asumida por el Estado y trasladada a la sociedad. Ante una atrocidad de la naturaleza o como resultado de una atrocidad humana, el Estado toma como propio la dirección y gobierno del Auxilio, haciéndolo con una parte de los impuestos e implicando, además, a los individuos que forman esa sociedad y a las organizaciones que generan esa sociedad. Es aquí donde el Individuo, aquel que era la esencia de la Caridad y de la Beneficencia, queda relegado, derivado a un mero residuo de la Ayuda.

Ya no se trata de un conjunto de necesitados a los que se debe prestar atención, ayudarles y auxiliarles, porque no son necesitados sino ciudadanos con derechos, cuyos derechos no se pueden ejercer formalmente por determinadas derivas extraidas de diversas circunstancias, de modo que la Ayuda ya no es caridad ni es bondad ni ha de ser agradecida, porque el resultado de una necesidad es un DERECHO.