08001-322.POLÍTICA: 28.¿Quién manda en el mundo?: 09.La Guerra

DOCUMENTO ANTERIOR

07997 (09.01.2024 - 27.¿Quién manda en el mundo?

                                  08.La Guerra)

DOCUMENTO POSTERIOR

08003 (10.01.2024 - Estado y Sub/Estado: Conceptos)

08009 (12.01.2024 - 29.¿Quién manda en el mundo?

                                  11.La Guerra)

        En este siglo XXI los ministerios de la guerra son ministerios de defensa, he aquí la hipocresía, es decir, ha dejado de entenderse el arte de la guerra como un arte asesino de destrucción para ser entendido como un arte defensivo de destrucción. Significa esto que es culpable quién mata porque ataca, y es inocente quien mata porque se defiende; toda guerra consume y fatiga, agota riqueza y crea miseria, y de la misma emergen nuevos ricos cuyo interés es perpetuarse como ricos. Abunda en esto, ciertamente, ya lo hemos visto, no es algo nuevo, pero el concepto de guerra cambia en el siglo XXI; los antiguos héroes, reducidos a guerreros y, posteriormente, a soldados, si bien persisten en el siglo XXI, han sido ampliamente superados por una masa de población negacionista de la guerra; ¿quién quiere ir a la guerra?

      En general podemos decir que los NEGACIONISTAS DE LA GUERRA son aquellos seudo/patriotas que huyen de la guerra afirmando las barbaridades de la guerra en los medios de comunicación extranjeros, y que una vez a salvo, declaman ínfulas patrióticas a los que se han quedado a hacer uso de la guerra. Así, los que se quedan a hacer la guerra sufren de daños físicos y mentales que repercuten positivamente en los negacionistas que, previamente, han huido. Por otra parte, ir al frente de batalla a dar un discurso y luego volver al calor del palacio presidencia es hipocresía en estado puro.

       Dicho de otra manera, en una nación/estado pre/democrática es fácil acudir a una manifestación contra la guerra, mientras que en una nación/estado dictadura es más fácil esconderse. 

        Podemos decir que desde un mundo individualista de la guerra pasamos a un mundo social de la guerra y hemos terminado en un mundo industrial de la guerra, desde la batalla individual a pecho descubierto a la batalla de yo disparo y tú mueres; dicho de otro modo, de una forma machista a una forma feminista.