jueves, 18 de enero de 2024

08025-155.LIBROS: 38.Contribución a Así habló Zaratustra de Nietzsche: 02.El Eterno Retorno

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08020 (16.01.2024 - 37.Contribución a Así habló Zaratustra 
                                       de Nietzsche
                                  01.El Eterno Retorno)

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08031 (21.01.2024 - 39.Contribución a Así habló Zaratustra 
                                       de Nietzsche
                                  De la Virtud y del Egoísmo)


         Cuando Zaratustra muera, retornará, no como lo hace Dios o la Suma de Dioses, sino con el ánimo de enseñar, de nuevo, la venida del Superhombre, pues el hombre no ha escuchado a Zaratustra. Al despertar en su cueva, donde está retirado, sufre del dolor en el eterno círculo, su voz lo llama, sus oídos se abren, sus ojos abandonan el sueño, ya basta de roncar, tiene que hablar, sus animales le acompañan y le dicen “tú eres el eterno retorno de las cosas”; y le entienden ya que ellos mismos retornan con las cosas y lo han hecho en una infinidad de veces, pues las cosas son con los animales de Zaratustra. El “ser” es como un reloj de arena, basta con invertirlo para que comience de nuevo a vaciarse y procure de la vida que todo sea semejante, siendo así que Zaratustra retorna para enseñar nuevamente a los hombres la llegada del superhombre. 

        En cierto sentido todo en la naturaleza regresa; viene el viento, se va, y regresa; llega el agua a la orilla, retrocede, y regresa; el hombre llega al nacer, retrocede durante su vida hacia la muerte, y desaparece; todo, pues, se origina, se expande, y finalmente se extingue. Siempre el proceso natural es el mismo, y de igual modo las especies aparecen, se desarrollan, y finalizan. Acontece lo mismo en la historia, lo que nace como hipótesis muta en tesis y finaliza como síntesis para renacer como hipótesis. 

       Dicho de otro modo: un nuevo comienzo requiere que Lo/Eterno sucumba en la libertad de la Persona, donde todo termina, cosa que sabe la Persona por su cerebro, pero no lo incorpora a su realidad, de modo que el tránsito por el Universo se realiza sin interferir en su devenir. Es así como el ETERNO RETORNO es un imaginario, una imagen, simbolismos y conceptos, lo que está dentro del autor, esto es, una idea intransitable y no trasmisible, la cual puede entenderse de cualquiera manera y retorcerse en un espacio sin tiempo, donde la Persona es, tan solo, una pieza que no puede confiar en su inacabada conciencia. 

        A la espalda de la persona se encuentra el Instinto de Conservación, delante están las metas y los fines y entre ambos la persona se ve como un héroe. 

       En resumen, toda evolución termina siendo una involución, nos dice Cómodo Centón; evoluciona lo real, nunca lo imaginario, y, de igual modo, una idea/origen jamás evoluciona, ya que se alejaría de su origen como idea corrupta de sí misma. Ahora bien, toda evolución requiere de un espacio/tiempo para evolucionar, es decir, necesita nacer y morir, de otra forma seria “eterna” y, por lo mismo, no evolucionaría. Toda evolución queda, conforme a lo dicho, dentro de un proceso entre un principio y un fin, de manera que nace en su origen y muere en su origen, esto es, toda evolución, involuciona, de lo que resulta que evolucionar carece de sentido/razón. No obstante, todo se empeña en evolucionar. Sí evolucionar es un sinsentido y sinrazón, la involución es evolucionar hacía el origen y rechaza evolucionar hacia el final, de forma que no hay mayor evolución que la involución.

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