jueves, 29 de septiembre de 2011

00707-14.FIESTAS: 01.San Miguel en el pueblo de Aguas (Alicante)

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Hoy es SAN MIGUEL, y SAN GABRIEL y SAN RAFAEL, pero los dos últimos parece que cuentan menos que el primero. No son ángeles comunes sino que lo son "superiores", de ahí que respondan al titulo y grado de ARC-ÁNGELES o ARCÁNGELES.

GABRIEL es la fuerza de Dios en ganar, es resurrección, misericordia, venganza, muerte, revelación, pero esencialmente "anuncia" y especialmente amenaza con el día del "juicio final". RAFAEL es la medicina de Dios, aquél que ayuda a los enamorados y los defiende del demonio Asmodeo. Pero destaca MIGUEL, que es el que gobierna, el que dirige, el protector, el jefe de los ejércitos de Dios, quién se enfrentará a Satanás, y naturalmente lo vencerá, que de otro modo no podrá ser.

Sin embargo, hoy era un DÍA ESPECIAL. En la ya extinta "sociedad rural", aquella que trabajaba, de sol a sol, en el campo, hoy era el día de pagos y cobros. Los "poderosos", aquellos que disponían de grandes extensiones de tierra, llamada "vínculos" que otros trabajaban, enviaban a sus "apoderados" por los lugares, en este caso "pago de Aguas", de sus señoríos para el cobro de toda una serie de derechos, a los que estaban sujetos labradores y campesinos.

Hay en el pueblo de AGUAS, en la provincia de Alicante, una familia, LOS IVORRA, conocidos antiguamente como "los mayorazgos" que conserva un LIBRO DE CUENTAS, donde anualmente venían a reflejarse los "pagos" que se realizaban a favor del MARQUES DEL BOSQUE. Estos abonos de los derechos de propiedad del señorío se realizaban el "día de San Miguel", existiendo la posibilidad de un segundo plazo, como en la actual "declaración de la renta", que se ejecutaba el "día de navidad", aunque, en ocasiones, constan anotaciones de "retrasos en los pagos".

Dicho LIBRO DE CUENTAS arranca en el año 1703, quedando en sus páginas reflejado diversos conceptos legales impositivos como eran pensiones, censo enfitéutico, censo redimible, baños, heredades, luismos, diezmos, herencias y legitimas. Las tierras, como objeto impositivo, eran de arar, de secano, de huerta, y contenían almendros, algarrobos, higueras, trigo, atochas y olivos, respondiendo a las medidas de tahullas, brazas, jornales, octavas y barchillas. Las monedas empleadas eran libras, sueldos, dineros, reales vellón, maravedís, monedas de plata, escudos, monedas de oro, milésimas y, finalmente, pesetas.

Una vez las cuentas quedaban saldadas, el pueblo de AGUAS se entregaba a la celebración de la fiesta patronal de Nuestra Señora del Santísimo Rosario, tras lo cual llegaban los "fríos", y con ellos los días de recogimiento, de la reparaciones domésticas, de la elaboración del esparto y, si era posible, de dejar preñadas a las mujeres, ya que si se atinaba en este "ejercicio" y todo era propicio, podía la "mujer preñada" ayudar en la "siembra" de primavera, "parir" antes de la cosecha y "trabajar" en la recogida de la misma, lo que era posible porque en aquella "sociedad rural" las mujeres eran hombres inferiores, no como ahora que van camino de ser hombres superiores, y los niños se criaban solos, y no como los de ahora, que responden al lema de "mírame y no me toques".

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