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La Inteligencia se ejerce en los conceptos, en los juicios y en el raciocinio. La Razón lleva a los principios supremos, a lo eterno del bien y de lo verdadero, manifestando que lo divino yace en el Hombre. La Voluntad redacta, con su creatividad,los juicios a priori de las experiencias. Es de esta forma que las ideas no interesan en la medida que son evidentes los cambios y los procesos de la Naturaleza, la cual es el verdadero mundo, sede de la mutación y del movimiento, pero en esta evolución la forma mecánica del movimiento, bien que se entiende, determina como los hechos funcionales cuantitativos son configuraciones resultantes de formas, de modo que el orden cualitativo tiende hacía su propia forma. Surge en este punto, junto a los cuatro elementos, un quinto, el ÉTER, del cual están formados los astros. Nos encontramos ante la Idea de la existencia de un solo mundo fraccionado en dos mitades. La línea divisoria es la LUNA; por encima de ella encontramos la eterna ubicación de las estrellas, que son imperecederas e imbuidas de un movimiento local, mientras que por debajo de la La Luna hallamos el espacio especifico de los hombres, sujeto a la constante mutación. Este movimiento se entiende eterno dentro de un tiempo que es infinito y que proporcionando la eternidad a las ESPECIES establece el nacimiento y muerte de los seres individuales. Como la Idea, las Especies son eternas, de lo que deduce éste pensamiento que siempre ha existido el Hombre o, dicho de otra modo, que la Idea de Hombre es eterna. Así, sin descubrir el Origen de la Cosa, la Idea explica la estructura del Universo mediante el fundamento de la Razón; el PRIMER MOTOR o MOTOR INMÓVIL mueve los distintos motores que forman parte de las dos fracciones en las que se divide el mundo, de modo que no moviéndose el Eterno, que no depende de otro y lo es por sí, pone en movimiento todo lo demás. Es asi como lo Eterno es vida que se mueve por sí misma, que piensa y que se piensa así mismo, que no tiene necesidad externa.
Nos encontramos en un PUNTO DE INFLEXIÓN en la Evolución de las Ideas. La Idea del Hombre establecía, hasta ahora, como el mundo real vive bajo el mundo de las ideas. El Punto de Inflexión nos ofrece una nueva Idea del Hombre; tras el mundo real, que es lo primero, se desarrolla el mundo de las ideas. Hasta este momento de la Evolución de Las Ideas se establecía una doble concepción de la vida basada en la dualidad Materia-Forma, estableciendo como la Materia tiene una forma, y como toda Forma responde a una materia, confundiéndose ambos conceptos en los antiguos relatos sobre el Origen del Hombre y de la Cosa; el Eterno crea dioses, después hombres, y sigue con otras formas menos evolucionadas, al tiempo que determinadas formas etéreas generan materia en diferentes estadios de evolución, mientras que, sin determinar el origen de la Materia, se desprende materia de una Primera Materia que se desarrolla y toma cuerpo en forma de Forma. Podemos decir, llegados a este punto de la Evolución de Las Ideas, que los conceptos "ideales" y los conceptos "reales" rompen la aparente unicidad del proceso de la Evolución de Las Ideas, para desarrollar dos vías de pensamiento que, periódica y alternativamente, van a dominar en la Evolución de Las Ideas.
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