00764-11.DE LO FEMENINO: ¿Quién ama más a la mujer?

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-I-

Un FEMINISTA es aquel que está dominado por su lado "femenino", de hecho la palabra "feminista" lo es del genero femenino, y es aquel "hombre" cuya estima masculina está en plena y evidente decadencia, porque sufre de depresiones paralelas y posee actitudes despreciables. Lo que caracteriza al "feminista" es su posición ante sí mismo: no se soporta como hombre; de ahí que sonría tímidamente ante las mujeres y no sepa defenderlas dentro de un círculo "machista", ya que lo que un "feminista" está viendo en el concepto general de "mujer" es a su "madre" y a su "hermana" y a su "hija", y llegado el caso, a su "mujer". Ciertamente, no podemos generalizar, hay mujeres inteligentes y las hay tontas, pero para un "feminista" es la "amistad" lo que lo relaciona con el total del conjunto de las mujeres, ya que la "mujer", en su calidad de persona, busca al "feminista", pues éste la iguala al "hombre", la obedece y aún le ríe el chiste, mientras que el "feminista" encuentra entre las mujeres una vía de escape a su "madre-hija-hermana-esposa".

Ahora bien, en su calidad de MUJER, lo que busca la "mujer" es un hombre, "macho" por más señas; ese que cuando hay que apagar un incendio deja a la mujer, con la benevolencia y admiración de ella, en una zona de seguridad, entretanto él se enfrenta al fuego (véase documento 00742 de éste índice), mientras que en su calidad "femenina" lo que busca es a un "feminista" con el que poder hablar.

El feminismo en el Hombre-Femenino brota de una ilusión; cree que siendo "femenino" es más natural, más civilizado, más progresista y más humano, de tal manera que su "sensibilidad" pone en su "sitio" a la "maldad" del pene. Y es así, porque radica en la MUJER la idea clara y precisa de que un "pene" lo es si está al servicio de la "mujer", es decir, un "pene" ha de levantarse a la orden de la "mujer", de otro modo el "pene", si "piensa" por sí mismo, es un instrumento "machista"

-II-

Pareciendo, como parece, que un "feminista" ama a la mujer, deja el campo del odio al "misogeno", de donde lo primero que advertimos es la calidad "masculina" de la palabra "misogeno".

Un MISÓGINO, hay que decirlo, no tiene porque ser, necesariamente, un "macho", puede ser un "pervertido, y en esta segunda acepción un MISOGINO PERVERTIDO es un "feminista", y es un "macho" en la medida que ha de enfrentar su posición de la posición "feminista"; hay, pues, una dualidad en el "misógino pervertido" entre el "feminista" y el "misógino macho". Odia a las mujeres el "misógino pervertido", porque no siendo "hombre" y queriendo ser "mujer" no es "mujer". De modo que hay un campo compartido donde yace el "feminista" y el "misógino pervertido". Aquí vive ese HOMBRE que en edad avanzada de su existencia toma a una mujer-niña para aliviar la flacidez de su pene, y con él comparte "campo" esa MUJER que en edad avanzada de su existencia toma a un joven-hombre cuyo pene llene su dilatada vagina.

Un MISÓGINO MACHO es la esencia misma del concepto de "amor", de modo que "ama" por lo que las "cosas son" y no por lo que las "cosas han de ser", de tal manera que la "igualdad lo es" entre las personas y no entre sus géneros. El "misógino macho" busca a la mujer de verdad, a la mujer entera, a aquella que es recta, noble, inteligente, aquella que admite la independencia de pensamiento del "pene", aquella que reconoce "pensar con la vagina", porque para un "misógino macho" no hay nada más bello y necesario que una "mujer", pero ha de ser una mujer en estado puro, de modo que el "misógino macho" busca a la mujer que tiene alma, voluntad, que es persona, y no la busca por su hermosura ni por su bondad sino por su entendimiento y capacidad

-III-

Queda saber ¿por qué Dios no tiene mujer?, ¿por qué Satanás no tiene mujer?, pues si tan buena es la mujer, ¿cómo es que ni Dios ni Satanás tienen mujer?, ni que la hayan conocido, que sepamos, ni interés que parezcan tener en conocerla; pero, éste es otro asunto...