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-I-
Epicuro manifestaba como hay cosas "naturales y necesarias", y esto incluía los asuntos del comer, de modo que los sucesos de la vida, en la línea descrita, eran los estrictamente propios de la existencia; ciertamente, quién no come, muere, de lo que se deduce que "comer" es natural y necesario. Conforme a lo dicho, el comer si, pero de forma económica.
Ampliaba Epicuro a cosas "naturales e innecesarias", entre otras, el sexo, de modo que si bien son estas precisas para la transmisión de los átomos entre los seres humanos, no necesariamente todos los seres humanos han de practicarlas, ya que basta , y así se ha venido mostrando la historia, que unos pueden optar por la pervivencia de la especie humana, he aquí su carácter "natural", mientras que otros optan por el mero ejercitarse en la "innecesaria" actividad a favor de sus instintos, sin mostrar interés alguno en dejar vivo tras de si. De lo que se deduce que el "sexo" es natural e innecesario. Conforme a lo dicho, el sexo si, pero con cuidado, sin arriesgar.
Finalmente, firma Epicuro, que las cosas "innaturales e innecesarias" venían representadas , entre otras, por la política, ya que si bien el ser humano, como individuo, vive en sociedad no es menos cierto que la sociedad domina y somete al ser humano, trastornándolo en un ser social, haciéndolo innatural e innecesario como individuo, y convirtiéndolo en un ser comunal que antepone a su pueblo por encima de su individualidad. De lo que se deduce que la "política" es innatural e innecesaria. Conforme a lo dicho, la política hay que evitarla.
Concluía Epicuro que todo "placer" es un bien que acarrea dolor.
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