lunes, 29 de mayo de 2017

03641-158.ALICANTE: 24.Historia: 1923-1931

DOCUMENTO ANTERIOR
03632 (23.05.2017 - 23.Historia: 1900-1922)

DOCUMENTO POSTERIOR
03645 (29.05.2017 - 25.Historia: 1931-1936)


    La muerte de Cánovas primero y Sagasta después, el fraccionamiento progresivo, aunque lento, de los dos principales partidos, Conservador y Liberal, la guerra en Marruecos, la huelga de agosto del año 1917, la progresiva subida del socialismo y de los sindicatos, con la aparición de partidos separatistas, así como un temor de la proximidad de una revolución, hacen surgir la idea de un regeneracionismo que acabe con el sistema oligárquico y caciquista de la restauración, lo que da lugar a la DICTADURA DE PRIMO DE RIVERA; los objetivos son claros... ley y orden, terminar la guerra en Marruecos y reiniciar la democracia.

      Sin embargo, la realidad es otra y consiste en la incorporación de los políticos de la restauración a la nueva idea, lo que hace que oligarquia y caciquismo continuaen en sus posiciones. Así la iglesia y la burguesía vieron en Primo de Rivera a un salvador, los progresistas callaron, mientras socialistas y republicanos mantenían la neutralidad. La PAZ SOCIAL se impuso.

     En 1930 se instalan las DICTADURAS BLANDAS del general Berenguer (liberal) y del almirante Aznar (progresista), lo que permite la decadencia monárquica y el auge del republicanismo. En ALICANTE es un republicanismo muy fraccionado; a la izquierda tenemos Partido Republicano Radical Socialista (Lorenzo Carbonell), le sigue el Partido Republicano Radical de Lerroux, Acción Republicana de Azaña (pequeña burguesía y profesionales con Ángel Pascual Devesa) que derivará en Alicante en Izquierda Republicana, y la Derecha Liberal Republicana de Alcala Zamora (republicanos y monárquicos desafectos). En 1931 ganará la alcaldía la Conjunción Republicanos y Socialistas y será alcalde Lorenzo Carbonell. La SEGUNDA REPÚBLICA HA LLEGADO.

    ALICANTE es una ciudad de rango medio que asiste a una evidente expansión de carácter demográfico y urbanístico; su población se eleva a 73.000 habitantes y aumentará a 100.000 durante los años de guerra (1936-1939). Conforme datos de la época el 12% de los alicantinos trabajan en el sector primario, el 35% lo hace en el secundario y ya es el 53% que lo hace en el terciario. Destaca el Padrón de Pobres que se eleva a cerca de 1.000 familias en estado de indigencia absoluta, la carencia de escuelas, aunque se abren 23 en 1932 mientras son destruidas escuelas religiosas, el 40% de analfabetos, el elevado paro, y los proyectos urbanísticos que, en su mayoría, no terminarían por culminar, como la Playa de San Juan, el desmonte de la Montañeta, la remodelación del área al oeste de la Rambla, la construcción de un aeropuerto de carácter nacional o hacer del castillo de San Fernando un parque público, pero si se inician y terminan proyectos de la Dictadura de Primo de Rivera como son el Palacio de la Diputación, diversas escuelas, la Casa de Socorro y, sobre todo, se inicia el ensanche al oeste de las derruidas murallas.

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