martes, 30 de mayo de 2017

03649-161.ALICANTE: 27.Historia: Marzo de 1939

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03652 (01.06.2017 - 28.Historia: 1939-1975)
06701 (14.12.2021 - 35.Historia: 01.Refugios de 1936-1937
                                  Leyes Históricas de Memoria, 
                                      de Desmemoria y Selectiva)


     ALICANTE fue una ciudad de retaguardia como ya vino sucediendo en otras ocasiones a lo largo de la Historia de España, y como tal espacio se caracterizó, durante la Guerra de 1936-1939, por ser una ciudad de auxilio a las tropas beligerantes y de acogida para huidos de los campos de batalla o bien de zonas caídas en manos enemigas, y por el PUERTO se accedía al aprovisionamiento de vituallas, lo que hacia de su dársena un elemento esencial para el mantenimiento de la propia guerra. Ambas características, recepción de población y punto de aprovisionamiento, incidían en un aumento de sus habitantes, de forma que en tiempos de guerra ha sido Alicante un centro productor de cultura, un lugar activo en ideas y con una vida social cosmopolita. En esto reside el hecho de los BOMBARDEOS durante la Guerra de 1936-39, lo que debe ser entendido como un castigo ejercido por el enemigo, pues el valor estratégico de Alicante, tanto posicional como productivo para asuntos de guerra, es prácticamente nulo. 

      El Gobierno Negrín termino su peregrinaje a pocos kilómetros de Alicante, en el entorno de los pueblos de Elda-Petrel-Monóvar, en la llamada POSICIÓN YUSTE y aeródromo provisional El Mañá, mientras el general Casado, junto con otros (republicanos, socialistas y anarquistas), formaba el Consejo Nacional de Defensa el cinco de marzo de 1939, con el objetivo de levantarse contra el Gobierno Republicano y tratar de proceder a una paz honrosa con Franco. Al día siguiente, seis de marzo, Negrín y los suyos (comunistas) abandonaban España en unos aviones. El día nueve de marzo en la ciudad de Alicante, los casadistas detuvieron a los comunistas.

     El resto de marzo de 1939, Alicante fue recibiendo refugiados que se agolpaban en el puerto para tomar pasaje en buques que se dirigían a Orán. El barco más famoso fue el Stanbrook, que se llenó con 2.600 pasajeros y que terminó navegando con el agua por encima de la línea de flotación, pero el último en abandonar el puerto de Alicante fue el Maritime (28 de marzo), donde embarcaron 32 autoridades republicanas y se prohibió el embarque de entre 12.000-15.000 republicanos que quedaron en el puerto y en las playas a la espera de la llegada de los vencedores.

     En la tarde del 29 de marzo ya se podían ver los estandartes de los vencedores en algunos edificios. El día 30 de marzo se nombraron a las nuevas autoridades, ocupando la alcaldía Ambrosio Luciañes, se informaba por radio que Alicante ya era de Franco, y entraba la División Littorio (italianos) en la ciudad, para hacerlo en el puerto, el día 31 de marzo, los buques Júpiter y Vulcano que cargaban los batallones 121 y 122 del Ejercito de Galicia.

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